La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) participó en Ushuaia de un taller de intercambio que tuvo por objetivo reafirmar el compromiso de ambos países en el trabajo articulado y en estrechar los vínculos políticos y técnicos en post de la gestión integral del castor en la Isla Grande de Tierra del Fuego.
La acción se enmarca dentro de la articulación interinstitucional e interjurisdiccional fortalecida desde el año 2015 mediante la ejecución del Proyecto Fortalecimiento de la gobernanza para la protección de la biodiversidad mediante la formulación e implementación de la Estrategia Nacional sobre Especies Exóticas Invasoras (Eneei), coordinado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, con apoyo del Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF) y la asistencia de la FAO como agencia de implementación.
La actividad desplegada durante dos jornadas contó con las exposiciones de autoridades nacionales que relataron las experiencias de implementación de los proyectos referidos al castor, tanto en Argentina como en Chile, a la vez que se analizaron las perspectivas para el abordaje de la problemática de esta especie en el marco del acuerdo binacional.
En el encuentro también se expusieron las conclusiones de los distintos grupos de trabajo, se plantearon indicadores para el análisis de la recuperación de los ambientes restaurados y se recorrieron las zonas de influencia y afectación, se trabajó en conjunto con el equipo provincial de Tierra del Fuego y autoridades de FAO, y se abordaron acciones preventivas con autoridades chilenas de manejo de EEI.
El problema socio ambiental de las Especies Exóticas Invasoras
Las EEI son animales, plantas y microorganismos transportados por las personas por fuera de sus límites naturales de distribución que, una vez en un nuevo territorio, se expanden y se vuelven dominantes.
Constituyen uno de los principales desafíos para la conservación de la diversidad biológica, y son responsables de enormes pérdidas económicas, así como de enfermedades y de impactos sobre valores culturales. Según los listados de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), las EEI son responsables de la retracción de una de cada tres especies de animales amenazados en el país y son el principal desafío de conservación en nuestros parques nacionales y reservas provinciales, municipales y privadas.
Las acciones de prevención no deben limitarse solo a las especies que aún no han sido introducidas en el territorio de interés, sino que deben estar dirigidas a evitar el escape y la expansión de especies que ya están presentes en determinadas jurisdicciones.
Para ello resulta fundamental desarrollar y mantener actualizada una lista oficial de EEI y Especies Exóticas Potencialmente Invasoras (EEPI) clasificadas en función del riesgo que representan y de la importancia eventual de las actividades productivas, científicas o de otra naturaleza que dependan de ellas.
