Como parte de un esquema de fomento para el agregado de valor de las economías regionales, el empresario Roberto Urquía propone que el país adopte una "política" espejo con los países importadores en materia de aranceles.
Para el industrial, Argentina debe tener una estrategia acertada de defensa arancelaria, para evitar que los países importadores se lleven las materias primas para procesarlas en destino.
"China procesa entre 90 a 100 millones de tonelada anuales, y produce 20 millones. Para ello, grava con el tres por ciento de arancel el ingreso de poroto, pero castiga con el cinco por ciento el ingreso de harina y con el nueve por ciento la importación de aceite" destacó el director de Aceitera General Deheza (AGD), durante una videoconferencia virtual, organizada por Infocampo.
Esquema
Urquía recordó que a finales de la década de 1980, durante un seminario en Río de Janeiro, una propuesta argentina fue eliminar todos los aranceles en el complejo oleaginoso a nivel mundial. "Hace más de 30 años que venimos con esta propuesta y no la aceptan. Saben que con la competitividad de Argentina les cueste mucho al resto competir", reconoció.
El proteccionismo comercial para el agregado de valor no es sólo propiedad de China. Estados Unidos, por ejemplo, grava con un arancel de casi 50 por ciento el ingreso de biodiesel argentino.
"No hemos encontrado demasiadas reacciones en Argentina ante estos gravámenes, denunciándolo ante los foros internacionales", observó el industrial.
Modelo de arraigo
La defensa del agregado de valor no sólo tiene un componente económico, en la generación de divisas, sino también social, sobre el que Urquía puso el acento.
"El agregado de valor en origen es fundamental para que los pueblos del interior puedan darle expectativas a sus jóvenes de quedarse donde nacieron y frenar así la monstruosa emigración hacia las grandes centros urbanos que están desbordados en cuanto a prestaciones de servicios", manifestó el director de AGD.
En ese aspecto, valoró la iniciativa de trabajo en Córdoba donde, "más allá de las ideologías políticas" aclaró, se trabaja en el fomento de las economías del interior. Puso como ejemplo el reciente proyecto de ley de promoción de los biocombustibles y bionergía.
"Tenemos que pensar en cómo ampliar estos modelos, dejando de lado la ideología, y ayudar a generar trabajo. Una forma de hacerlo es con el agregado de valor", admitió.
