Tras la presión de los gobernadores y el sector productivo, el Gobierno decidió postergar por 90 días la resolución que permite el ingreso de carne con hueso y material reproductivo a la Patagonia, o sea, desde las zonas libres de Fiebre Aftosa con vacunación hacia una región que no se aplica la vacunación.
Si bien no hay una oficialización de la decisión, el Gobierno les avisó a los gobernadores de la Patagonia y a los dirigentes nacionales sobre el retraso de la medida que se había publicado este martes en el Boletín Oficial, bajo la Resolución 180/2025, que llevaba la firma del titular del Senasa, Pablo Cortese.
Explicaciones
“Es muy raro, muy complejo lo que pasó”, sintetizó Daniel Lavayen, representante de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) en Río Negro, explicando su rotundo rechazo a la medida oficial.
“Hay exportaciones que difieren a la del resto del país, tanto vacuno como del sector ovino. La parte compradora es muy exigente con respecto a la zona libre de vacunación de aftosa”, amplió.
La polémica llegó tras la modificación de Senasa de las condiciones sanitarias para el ingreso de carnes (con o sin hueso), productos cárnicos y material reproductivo, desde las zonas libres de Fiebre aftosa con vacunación hacia la Patagonia, una región del país donde no se aplica la vacunación.
Adecuación
Esta adecuación, explicaron desde el organismo sanitario, está en línea con las recomendaciones de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y establece pautas sobre la maduración, empaque, procesamiento y transporte de carnes, así como requisitos sanitarios específicos para el material reproductivo.
“Las condiciones epidemiológicas actuales, que reflejan el grado de avance alcanzado en la Argentina y en la región con respecto a la Fiebre Aftosa, además de la experiencia acumulada y de las actualizaciones realizadas al capítulo de dicha enfermedad del Código Sanitario para los Animales Terrestres (Código Terrestre) de la OMSA, ameritaron readecuar los requisitos para los movimientos definidos en relación con los animales vivos susceptibles a la enfermedad”, explicó la resolución.
Al respecto, agregó que “la actualización en las condiciones para los movimientos mencionados no representa un impacto para el comercio internacional y el mantenimiento de los mercados con otros países o bloques vigentes”.
“Los muestreos realizados por el Senasa en los últimos años demuestran la ausencia de circulación viral en todo el territorio nacional. Sumado a la ausencia de circulación viral, este organismo realizó una evaluación cuantitativa del riesgo de introducción del virus de Fiebre Aftosa a la Zona Libre de Fiebre Aftosa sin vacunación a través de asado con hueso bovino proveniente de la Zona Libre de Fiebre Aftosa con vacunación, concluyendo que es posible asumir que el riesgo de ingreso de dicho virus a la Zona Libre de Fiebre Aftosa sin vacunación por ese medio es insignificante”, explicó la resolución.
Según el Senasa, se busca es garantizar la sanidad del ganado y la inocuidad de los productos, sin afectar la comercialización o el abastecimiento interno, ni el mantenimiento de los mercados con otros países.
Y el objetivo es bajar los precios de la carne en La Patagonia, que venían subiendo muy por encima de lo que venía sucediendo en el resto del país. Es que en la Patagonia solo se podían comercializar (hasta hoy) carne producida en esa misma región, mientras que en el resto del país se puede comercializar carne entre provincias.
La prohibición de enviar carne con o sin hueso a la Patagonia regía desde 2001, cuando hubo un rebrote de la aftosa en la Argentina que se estableció la regionalización entre las diferentes zonas determinadas en el Plan de Erradicación de la Fiebre Aftosa. Así, a Patagonia empezó a ser libre de aftosa sin vacunación y el resto de país, libre de aftosa con vacunación.