Como parte del proceso de desregulación que el Gobierno nacional lleva a cabo en la economía, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) modificó las condiciones sanitarias vigentes desde hace 24 años.
A través de la resolución 180/2025, publicada este martes en el Boletín Oficial y que lleva la firma del presidente del Senasa, Pablo Cortese, se habilita el ingreso de carnes –con o sin hueso–, productos cárnicos y material reproductivo, desde las zonas libres de fiebre aftosa con vacunación hacia la Patagonia, una región del país que está libre de la enfermedad sin vacunación.
Esta adecuación, explicaron desde el organismo sanitario, está en línea con las recomendaciones de la Organización Mundial de Sanidad Animal (Omsa) y establece pautas sobre la maduración, empaque, procesamiento y transporte de carnes, así como requisitos sanitarios específicos para el material reproductivo.
“Las condiciones epidemiológicas actuales, que reflejan el grado de avance alcanzado en la Argentina y en la región con respecto a la fiebre aftosa, además de la experiencia acumulada y de las actualizaciones realizadas al capítulo de dicha enfermedad del Código Sanitario para los Animales Terrestres (Código Terrestre) de la Omsa, ameritaron readecuar los requisitos para los movimientos definidos en relación con los animales vivos susceptibles a la enfermedad”, explicó la resolución.
Al respecto, agregó que “la actualización en las condiciones para los movimientos mencionados no representa un impacto para el comercio internacional y el mantenimiento de los mercados con otros países o bloques vigentes”.
En esa zona, que sólo representa el 3% de la hacienda en pie de todo el país, el número de cabezas es insuficiente para el abastecimiento. Por eso, alrededor del 60% de la carne que se consume en esa región (sólo entran cortes sin hueso) proviene de frigoríficos ubicados al norte de la provincia de La Pampa.
“Los muestreos realizados por el Senasa en los últimos años demuestran la ausencia de circulación viral en todo el territorio nacional. Sumado a la ausencia de circulación viral, este organismo realizó una evaluación cuantitativa del riesgo de introducción del virus de Fiebre Aftosa a la Zona Libre de Fiebre Aftosa sin vacunación a través de asado con hueso bovino proveniente de la Zona Libre de Fiebre Aftosa con vacunación, concluyendo que es posible asumir que el riesgo de ingreso de dicho virus a la Zona Libre de Fiebre Aftosa sin vacunación por ese medio es insignificante”, explicó la resolución.
Según el Senasa, se busca es garantizar la sanidad del ganado y la inocuidad de los productos, sin afectar la comercialización o el abastecimiento interno, ni el mantenimiento de los mercados con otros países.
Y el objetivo es bajar los precios de la carne en La Patagonia, que venían subiendo muy por encima de lo que venía sucediendo en el resto del país. Es que en la Patagonia solo se podían comercializar (hasta hoy) carne producida en esa misma región, mientras que en el resto del país se puede comercializar carne entre provincias.
Carne a la Patagonia: una restricción desde hace 24 años
La prohibición de enviar carne con o sin hueso a la Patagonia regía desde 2001, cuando hubo un rebrote de la aftosa en la Argentina que se estableció la regionalización entre las diferentes zonas determinadas en el Plan de Erradicación de la Fiebre Aftosa. Así, a Patagonia empezó a ser libre de aftosa sin vacunación y el resto de país, libre de aftosa con vacunación.
Los requisitos de ingreso para carnes con y sin hueso y productos cárnicos son los siguientes:
1. Deben haber sido obtenidas de animales que permanecieron en un país o una Zona Libre de Fiebre Aftosa con o sin vacunación, que hayan sido sacrificados en un establecimiento habilitado por el Senasa y hayan resultado aptos en el examen ante y post-mortem;
En caso de ser obtenidas de rumiantes, debe excluirse la cabeza, incluyendo la faringe, la legua y los nódulos linfáticos asociados;
2. Las carnes frescas de rumiantes, con/sin hueso y/o menudencias, deben haberse obtenido de canales a los que se le han extraído los principales ganglios visibles y que han sido sometidos a un proceso de maduración a una temperatura de más de dos grados centígrados durante al menos 24 horas después del sacrificio, y en las que el valor del potencial de hidrógeno (PH) ha sido menos o igual a 5,9 , medido electrónicamente en la mitad del músculo dorsal largo previo al cuarteo y/o desposte.
3. Los cortes o cuartos primarios enfriados y/o congelados, con/sin hueso, deben contar con un empaque primario y uno secundario debidamente rotulados cada uno de ellos individualmente;
Las menudencias comestibles deben contar con empaque primario y secundario debidamente identificado, pudiendo ser su presentación individual o en block, según producto en presentación enfriada y/o congelada.
Por el momento, la restricción sanitaria se mantendrá para el movimiento de hacienda, por lo que seguirá prohibido el ingreso a la Patagonia de hacienda en pie.
“Con esta medida, el Senasa reafirma su compromiso con la sanidad animal y la bioseguridad de la producción agropecuaria argentina, asegurando que los controles sean eficientes y acordes a los estándares internacionales”, cerró el comunicado.