En el tramo final de la temporada estival la cifra de muertos por ahogamientos en la provincia trepó rápidamente, tras una semana con cuatro hechos trágicos que provocaron cinco fallecimientos por esta causa.
De esta manera, Córdoba ya registra 18 muertes en ríos y lagos en poco más de tres meses. En su mayoría las víctimas fueron personas adultas. En solo dos casos murieron menores de edad.
El último episodio ocurrió este fin de semana en la Laguna Azul, espejo de agua ubicado en jurisdicción de La Calera, en el límite oeste de la capital provincial.
Según relataron testigos en el lugar, un joven de 20 años, oriundo de Buenos Aires, se alejó del sitio con seguridad, desoyó las advertencias de los guardavidas y minutos más tarde se hundió. De inmediato, los rescatistas nadaron hasta el lugar pero no pudieron salvarlo. Horas más tarde, su cuerpo fue encontrado por buzos a nueve metros de profundidad.
La semana comenzó con otro joven que también perdió la vida por asfixia respiratoria resultante de la sumersión en un medio líquido. El 11 de febrero, en el azud nivelador de Villa María de Río Seco, al norte provincial, un hombre de 26 años, oriundo de San Francisco del Chañar, murió tras ingresar al agua para refrescarse.
Según advirtieron sus amigos, había salido de un festival y la víctima no sabía nadar.
Horas más tarde, en el río San Antonio, se inició un operativo de rescate tras advertir que un hombre de 30 años ingresó al agua con la intención de cruzar a la otra orilla. Desapareció poco después al ser arrastrado por la corriente, producto de las crecidas por las lluvias en Villa Carlos Paz.
El hallazgo se produjo el 15 de febrero por la tarde, cuando durante los rastrillajes, se divisó el cadáver flotando a unos 400 metros del Puente Uruguay.
Las crecidas también provocaron dos muertes en el río Los Reartes. Diego Lagos (37) y Laura Carrasco Macedo (35) habrían sido arrastrados por el agua durante la siesta del lunes. El cuerpo de Lagos, quien se desempeñaba como policía en Santa Rosa, capital de La Pampa, fue hallado el martes. El de su pareja, un día más tarde.
Ambos se alojaban en carpa en el camping El Rincón de Mirlos, de Villa General Belgrano, ubicado unos kilómetros río arriba del lugar del hallazgo, en la localidad de Los Reartes.
Además de estas cinco muertes, esta semana se confirmó el fallecimiento de un hombre de 51 años que se accidentó en el agua al golpear su cabeza con las piedras a fines de enero en el dique La Quebrada, y tras varias semana internado, falleció a causa de un severo traumatismo de cráneo.
Las otras 12 muertes por ahogamiento en ríos y lagos ocurrieron desde mediados de noviembre en Mina Clavero (4), Nono (2), Carlos Paz, Los Molinos, Cabalango, Bialet Massé, Villa del Dique y Saldán.
Las estadísticas de este verano superan ampliamente el registro de 2023, añoen el que sólo hubo cinco muertos en espejos o cursos de agua de la provincia de Córdoba .
Siete niños muertos en piletas
Dylan Ruarte, un bebé de un año y cuatro meses que había caído en una pileta en la localidad de Pilar y murió a fines de enero tras estar seis días internado en el Hospital de Niños, fue la última víctima por ahogamiento en piscinas poco más de dos meses.
El 8 de enero un nene de dos años perdió la vida tras caer a la pileta en su casa en el barrio 9 de Julio de la Capital. Rápidamente fue trasladado al Hospital de Pronta Atención Cura Brochero donde constataron su muerte.
El 30 de diciembre se confirmó la muerte de Abigail Aybar, después de cinco días internada en gravísimo estado en el hospital Pasteur, de Villa María. La nena de 13 años se había desvanecido en una pileta de Hernando el 25 de diciembre.
El 28 de diciembre, Lorenzo Pereyra cayó al agua en una casa de Cruz del Eje y fue trasladado al hospital Aurelio Crespo. Por su gravedad, lo derivaron al Hospital Privado de la Capital, donde falleció.
También en una colonia de vacaciones, ocurrió otra muerte por ahogamiento. El 13 de diciembre falleció un nene de siete años en Las Higueras, al sur provincial, cuando se bañaba en el predio de la cooperativa. En el Hospital San Antonio de Padua de Río Cuarto constataron su muerte.
Finalmente, el 14 de noviembre la tragedia enlutó a Yacanto cuando dos niñas de uno y de cuatro años murieron en una pileta de un complejo de cabañas.
