Un grupo de más de 70 legisladores británicos solicitó al Gobierno del Reino Unido una revisión urgente de las condiciones de los 15 pingüinos papúa alojados en el Sea Life London Aquarium.
La solicitud, que se basa en las denuncias de activistas y organizaciones defensoras de animales, destacó que los animales permanecen en un entorno sin luz natural ni aire fresco, lo que impide su bienestar físico y social.

El acuario y sus condiciones
Los pingüinos, según denuncian, están ubicados en una instalación del Sea Life London Aquarium, situado junto al río Támesis, cerca del Parlamento británico.
Inaugurado en mayo de 2011, el recinto fue diseñado con el asesoramiento de veterinarios y especialistas, pero las críticas apuntan a que no proporciona un hábitat adecuado para las especies.
Según los activistas, los pingüinos cuentan con solo dos metros de profundidad en su piscina, una fracción de los 180 metros a los que podrían llegar a sumergirse en la naturaleza.
Manifestantes exigen la reubicación de los animales
La petición para la reubicación de los pingüinos ha ganado apoyo en las últimas semanas, sumando más de 37 mil firmas. En ella, los firmantes sostienen que la falta de espacio, junto a la ausencia de luz natural y aire fresco, hace que los animales no puedan desarrollar sus comportamientos naturales.
Además, activistas como Chris Packham, conocido presentador y defensor del medio ambiente, han liderado protestas frente al acuario, calificando la situación de “totalmente inaceptable”.
Reacciones desde el Parlamento y la sociedad civil
En respuesta a las denuncias, más de 70 miembros del Parlamento han enviado una carta al Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (Defra), instando a que se evalúe si los pingüinos deberían ser trasladados a un hábitat más adecuado.
Danny Chambers, del Partido Liberal Demócrata, calificó las condiciones como “totalmente inaceptables”, subrayando la necesidad de garantizar a los animales un espacio adecuado para su desarrollo.

La defensa del acuario
Ante las críticas, un portavoz de Merlin Entertainments, la empresa propietaria del Sea Life London Aquarium, defendió las condiciones del recinto. Aseguraron que el espacio fue diseñado junto a veterinarios y expertos, y que los pingüinos están “sanos y prosperando”. Además, señalaron que liberarlos en la naturaleza no es una opción viable, dado que los animales han vivido siempre bajo cuidado humano.
Qué pasará con los pingüinos
El debate sobre el bienestar de los pingüinos papúa continúa siendo un tema de discusión en el Reino Unido. Mientras tanto, activistas y parlamentarios seguirán presionando para lograr una solución que asegure que los animales vivan en un entorno que respete sus necesidades físicas y conductuales.





















