Un nuevo estudio de la Universidad de Oxford sobre la relación entre la ingesta autoinformada de alcohol de unas 25 mil personas en Reino Unido y sus escáneres cerebrales concluyó que no hay cantidades “seguras” de consumo.
El estudio observacional que cita la CNN en su portal apunta que el consumo de alcohol tiene un efecto sobre la materia gris del cerebro. “Cuando más bebía la gente, menor era el volumen de su materia gris”, dijo Anya Topiwala, investigadora clínica principal de Oxford.
“El volumen cerebral se reduce con la edad y más gravemente con la demencia. Un volumen cerebral más pequeño también predice un peor desempeño en las pruebas de memoria”, precisó la investigadora.
Y agregó: “Si bien el alcohol solo hizo una pequeña contribución a esto (0,8%), fue una contribución mayor que otros factores de riesgo ‘modificables’”. Topiwala explicó que los factores de riesgo modificables son “aquellos sobre los que se puede hacer algo, en contraste con el envejecimiento”.
El equipo de investigadores indagó sobre ciertos patrones de consumo, tipos de bebidas y otras condiciones de salud que influían en el impacto del alcohol en el cerebro.
Descubrieron que no hay niveles “seguros” de ingesta, es decir que cualquier cantidad de alcohol que se consuma es peor que no beberlo. El mayor riesgo se incrementa con la presión arterial alta, la obesidad o el consumo excesivo de alcohol.
“Muchas personas beben ‘moderadamente’ y piensan que esto es inofensivo o incluso protector”, apuntó Topiwala.
“Como todavía tenemos que encontrar una ‘cura’ para las enfermedades neurodegenerativas como la demencia, conocer los factores que pueden prevenir el daño cerebral es importante para la salud pública”, explicó.
No hay cantidades seguras
El alcohol es una sustancia de riesgo, algo que ya viene siendo estudiado desde hace tiempo, y no hay cantidades o bebidas que se consideren más seguras que otras.
“Si bien no podemos decir con certeza que no existe un ‘nivel seguro’ de alcohol con respecto a la salud del cerebro en este momento, se sabe desde hace décadas que beber en exceso es malo”, apuntó también a la CNN la jefa de investigación del Instituto de Estudios sobre Alcohol del Reino Unido, Sadie Boniface.
“Tampoco debemos olvidar que el alcohol afecta a todas las partes del cuerpo y existen múltiples riesgos para la salud”, dijo Boniface, quien no participó en el estudio de la Universidad de Oxford.
