Brenda Leiva, mamá del bebé J.L. uno de los bebés descompensados que se investigan en la causa del Hospital Neonatal, declaró en el juicio en la octava audiencia de la megacausa que transcurre en el Justicia de Cordoba.
Leiva dio a luz a su hijo el 11 de mayo de 2022. La mujer reconoció que había 4 enfermeras en la sala de parto y una de ellas le dijo que era su tocaya y que alcanzó a ver la contextura física similar a la de Brenda Agüero, aunque no llego a verle la cara. “Una de las enfermeras me preguntó cómo me llamaba y cuando dije ‘Brenda’ la enfermera que estaba detrás mío y me preparaba la comida dijo: Soy tu tocaya'”.
De esta manera sería la cuarta mamá que reconoce a la enfermera en la sala de parto o de recuperación.
Leiva dijo que su hijo nació con un apgar 9/9. La mamá de Leiva, abuela del niño, comenzó a notar que estaba frío y por eso piden asistencia y el personal médico le indica que debían ponerlo en incubadora. Allí permaneció dos horas en presencia de la abuela. Luego el bebé volvió con la mamá quien queda sola con el niño en la sala. Allí Brenda Leiva comenzó a preocuparse porque el niño se dormía, no succionaba su pecho, tenía la lengua afuera y temblaba.
El bebé estuvo en incubadora de 14 a 16 y a las 18 comienza a advertir al personal que notaba estos signos raros en su bebé. Cerca de las 23 enfermeras de neonatología lo atienden, ven que no tomaba la mamadera y Brenda cuenta que le dijeron: “Tenés que irte porque tu hijo queda internado’”.
La angustia de la mujer fue creciendo y en su testimonio quebró en llanto cuando recordó la escena que vio media hora después: “A las 23.30 mi hijo estaba lleno de cables y había un montón de médicos a su alrededor. La jefa de Neonatologia me dijo: ‘si esperabas media hora más tu hijo se te moria’”.
A partir de ese momento el niño estuvo internado 12 días en terapia. Los partes médicos indicaban que sus niveles de insulina eran altísimos y que no eran compatibles con los que podría tener un bebé nacido tras un embarazo con diabetes gestacional, como era el caso de Leiva.
Luego de que le dieron el alta, el bebé se tuvo que realizar controles en el Hospital de Niños y al mes de su nacimiento tuvo que ser internado por una afección respiratoria.
Brenda nunca supo exactamente por qué los valores de su bebé habían dado tan altos. En su testimonio mencionó que los médicos no encontraban explicación y que le dijeron que el cuadro y los valores de insulina no era compatibles con una hiperinsulina congénita sino que se debían a una inyección externa.
En sus controles posteriores, en el Hospital de Niños, le dijeron que si tenía secuelas en su desarrollo producto de este cuadro se manifestaría recién a la edad en la que el niño comienza el jardín de infantes.
J.L tiene hoy dos años. Brenda hoy realiza tratamiento psicológico en el Polo de la Mujer.
En su testimonio en el juicio recordó que cuando el caso se difundió en los medios ella pensó: “Gracias a Dios mi hijo no es uno de ellos”. La mujer dijo también que vio por los medios la detención de Brenda y que un grupo de mamás se iba a reunir con el Gobernador.
Recién el 24 de agosto (12 días después de la difusión del caso) llegó una persona del poder judicial que le informó que su bebé era uno de los ocho sobrevivientes.
En la causa hay una imputada como posible autora del hecho, que es la enfermera Brenda Agüero y 11 funcionarios y médicos por omisión u otros delitos asociados al hecho.
Al ser consultada sobre lo que espera del juicio, dijo: “Que paguen los que tengan que pagar por los bebés que no están y por lo que están vivos”.
Audiencia del lunes
Se espera que este lunes 20 de enero declaren Melody Molina, mamá de Brisa Molina, la beba que nació el trágico 6 de junio y falleció al día siguiente. También está previsto que declarenla abuela de la beba, Romina Cejas.
Se prevé que también brinden su testimonio Ludmila Torres, mamá de M.E.T, una de las bebas del 6 de junio que sobrevivió y la abuela de la beba, Sonia Torres.
