La Justicia de Córdoba se convierte en el epicentro de uno de los casos más trascendentes de la provincia. Comenzó este lunes 6 de enero un juicio histórico en los Tribunales provinciales, no sólo porque se da en una época inusual porque se trata de un hecho tan escabroso como complejo.
En el hospital Neonatal Ramón Carrillo, una persona inyectó adrede potasio –y, en algunos casos, insulina- a 13 bebés entre marzo y junio de 2022. Cinco murieron. Francisco, Benjamín, Ibrahim, Angeline y Melody no están. La presunta autora material es una enfermera del departamento de obstetricia, Brenda Agüero, que está detenida desde el 19 de agosto de 2022.
En medio del juicio que involucra a la trama de muertes en el Hospital Neonatal de Córdoba, Gustavo Nievas, abogado defensor de Brenda Agüero, enfermera acusada de ser responsable de la muerte de varios recién nacidos, denunció las irregularidades en el proceso judicial y criticó con la actuación del fiscal Raúl Garzón durante la investigación.
“Lo que queremos es que salga toda la verdad a la luz”, afirmó Nievas a La Voz. Según el letrado, durante más de dos años y medio, la fiscalía se encargó de ocultar pruebas fundamentales que podrían haber cambiado el curso de la investigación. “Se ocultó la verdadera prueba que estaba dentro del expediente y, en su lugar, se vendió información falsa al público, completamente mentirosa”, aseguró, indignado por lo que considera un intento de desviar la atención de la verdad.
Una de las denuncias más graves que realizó Nievas fue sobre el ocultamiento de las pruebas clave, como los resultados de la pericia psicológica de Brenda Agüero, así como información sobre la situación interna del hospital.
“Se ocultó que las autoridades del neonatal habían desmantelado el centro obstétrico. También se nos ocultó la desaparición de partidas enteras de remedios, que supuestamente fueron llevados al Ceprocor y nunca más aparecieron”, señaló el abogado. Además, agregó que más de 150 testigos no fueron considerados en el expediente.
Según Nievas, la hipótesis principal de la defensa está relacionada con una “asepsia generalizada” dentro del hospital, provocada por la invasión de virus y bacterias en el sector obstétrico. Este concepto hace referencia a una condición que se produce cuando hay una invasión de virus y bacterias en un lugar, como un hospital.
“Creo que no todos los niños murieron o se descompensaron por lo mismo. Algunas afecciones eran propias de los bebés, otras de las madres”, apuntó, tratando de arrojar luz sobre un contexto que, según su perspectiva, estuvo marcado por negligencias en lugar de malintencionadas acciones criminales.
Cuando se le pregunta por qué Brenda Agüero es la imputada en este caso el abogado afirmó “porque es mujer, porque es débil, porque es humilde, porque era el eslabón más corto de la estructura”.
Según el representante su clienta fue la elegida como responsable de un crimen que, según él, tiene raíces mucho más profundas dentro de la administración del hospital. “No se pagaba ningún costo con eso y servía para calmar la ansiedad de una sociedad que pedía respuestas. La elección de Brenda fue un intento de encontrar a alguien a quien culpar, sin considerar la verdadera complejidad del caso”, aseguró.
“Recién ahora, en 2022, vamos a tener la posibilidad de demostrar la inocencia de Brenda Aguero. Esto no es solo por ella, sino por todas las personas que han sido tratadas injustamente en este proceso”, concluyó el abogado, haciendo hincapié en que su clienta no es la culpable, sino una víctima más de un sistema que, según él, se encargó de ocultar la verdad para proteger a los responsables reales de la tragedia.