Con el paso del tiempo, la piel pierde elasticidad y la acción de la gravedad provoca que las cejas desciendan, especialmente en su extremo lateral. Este cambio puede dar al rostro un aspecto de cansancio o tristeza, e incluso, en algunos casos, reducir el campo visual.
Una de las técnicas más utilizadas para corregir esta caída es la cejaplastia directa, una cirugía menor que busca reposicionar la ceja en una ubicación más armónica y natural.
El procedimiento, según especialistas en oculoplastia, se realiza con anestesia local, de manera ambulatoria, y dura entre 45 y 60 minutos.
En qué consiste el procedimiento
Durante la intervención, el cirujano realiza una incisión precisa sobre la ceja, retirando el exceso de piel y tejido. Esto permite elevar la ceja sin necesidad de recurrir a cirugías más extensas en la frente.
“La cejaplastia directa logra un resultado inmediato y duradero, con una recuperación relativamente rápida”, explicó Moon Young Sin (MN 109036), médica del Servicio de Oftalmología del Hospital Italiano de Buenos Aires.
Entre sus principales ventajas se destacan la mejora estética y, en muchos casos, la recuperación del campo visual, cuando la caída de las cejas interfiere en la visión.
A quiénes se recomienda
Pueden beneficiarse de esta cirugía personas con descenso marcado de las cejas, ya sea por envejecimiento, factores genéticos o enfermedades neurológicas. También es una alternativa para quienes buscan una solución definitiva frente a procedimientos temporales como la toxina botulínica o los hilos tensores.
“La cejaplastia directa no es sólo una cuestión estética; también puede mejorar la función visual y la calidad de vida del paciente”, señaló la especialista.
Riesgos y cuidados postoperatorios
Como toda cirugía, puede implicar algunos riesgos, entre ellos, pequeños hematomas, asimetrías o una cicatrización visible. Sin embargo, gracias a los avances en técnicas de sutura fina, la marca suele quedar disimulada entre los pelos de la ceja.
El cuidado postoperatorio adecuado y la correcta selección del paciente son factores clave para lograr resultados satisfactorios.
La evaluación previa con un oftalmólogo especializado en oculoplastia es esencial para definir la técnica más adecuada en cada caso.
Resultados visibles y naturales
Además de devolver una expresión más descansada y juvenil, la cejaplastia directa permite restaurar la simetría facial y la expresividad de la mirada, con resultados que se mantienen en el tiempo.
“Reubicar la ceja en su posición natural no sólo rejuvenece el rostro, sino que también devuelve luminosidad y vitalidad a la mirada”, remarcó Sin.