El Monte Etna, ubicado en la isla de Sicilia, volvió a demostrar su poder con una espectacular erupción, la novena en cinco semanas, según reportes del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV).
La actividad estromboliana en el cráter sureste, acompañada de coladas de lava que iluminaron el cielo nocturno, ha generado un espectáculo visual que atrajo a turistas y vulcanólogos, aunque también obligó a cerrar sectores del aeropuerto de Catania por la emisión de cenizas.
Un espectáculo de lava y cenizas
La erupción comenzó en la noche del 18 de abril, con intensas explosiones estrombolianas en el cráter sureste, a unos 3.000 metros de altitud.
Según el vulcanólogo Boris Behncke, quien compartió imágenes desde Torre del Filosofo, el flujo de lava se ramificó en tres lóbulos principales, alcanzando la base del cráter y creando una “danza hipnotizante de chamas y chispas”.
El INGV reportó que la erupción produjo una nube de cenizas que alcanzó los 6.000 metros de altura, afectando localidades como Acicastello y Viagrande, donde la calidad del aire se deterioró.
El aeropuerto de Catania, situado a 30 kilómetros del Etna, cerró temporalmente los sectores A2, A3 y A3 bis para garantizar la seguridad de los vuelos, aunque las operaciones se reanudaron parcialmente el 19 de abril. Las autoridades elevaron la alerta de aviación a nivel naranja, según informó Euronews.
Un volcán en constante actividad
Con una altura de aproximadamente 3.330 metros, el Etna es el volcán más activo de Europa y uno de los más estudiados del mundo.
Su actividad, documentada desde el 425 a.C., incluye erupciones frecuentes que han moldeado el paisaje siciliano y atraído a científicos y turistas. En 2025, el volcán ha registrado un ritmo intenso, con 250 “minierupciones” en noviembre y diciembre de 2023, y eventos significativos en febrero y julio de 2024, según National Geographic.
La erupción de abril se suma a un año de actividad notable. En febrero, el Etna expulsó lava sobre laderas nevadas, captada por el satélite Landsat 8 de la Nasa, creando un contraste visual entre el magma y la nieve.
Además, en abril de 2024, el volcán sorprendió al mundo con miles de “anillos de humo” volcánicos, un fenómeno raro que se produce cuando el gas se dispara a alta velocidad por una chimenea estrecha, según explicó Behncke.
Impacto y medidas de seguridad
Aunque la erupción no ha causado víctimas ni daños significativos, las autoridades sicilianas han reforzado las medidas de seguridad.
El INGV mantiene una vigilancia constante, utilizando cámaras, drones y estaciones de monitoreo remoto para evaluar la evolución del volcán. Los vulcanólogos consideran la erupción “subterminal”, originada en una fisura secundaria, lo que reduce el riesgo inmediato, pero advierten sobre la imprevisibilidad del Etna.
“Es un volcán de conducta abierta, pero siempre puede sorprender”, señaló Behncke en X.
El flujo de turistas, atraídos por las caminatas guiadas y las vistas del cráter, ha generado preocupaciones. Francesco Ciancitto, guía vulcanológico, advirtió en La Repubblica que acercarse sin expertos es arriesgado, especialmente durante erupciones activas.
Las autoridades han restringido el acceso a ciertas áreas y pedido a los visitantes verificar el estado de los vuelos antes de viajar al aeropuerto de Catania.
Un fenómeno que cautiva al mundo
Las imágenes de la erupción, compartidas por distintos medios y usuarios en X, han recorrido el mundo.
La erupción coincide con un periodo de alta actividad en otros volcanes, como el Stromboli, que también ha mostrado explosiones recientes en el mar Tirreno. El INGV monitorea ambos para anticipar posibles contingencias, mientras los sicilianos, acostumbrados a convivir con el Etna, se preparan para las consecuencias de la ceniza y los temblores.
Un recordatorio de la fuerza de la naturaleza
El Etna, con su historia de erupciones devastadoras como la de 1669, que arrasó parte de Catania, sigue siendo un laboratorio natural para los vulcanólogos y un atractivo para los amantes de la aventura. Mientras la erupción de abril de 2025 se estabiliza, las autoridades instan a la precaución y recomiendan seguir las actualizaciones del INGV (www.ingv.it) y la Agencia Espacial Europea (www.esa.int) para información oficial.