Un equipo de astrónomos anunció el descubrimiento de un intrigante objeto en el espacio profundo que emite potentes señales de radio y rayos X con una regularidad asombrosa, repitiéndose exactamente cada 44 minutos. Este hallazgo, publicado en la revista Nature, plantea nuevas preguntas sobre los fenómenos cósmicos y podría indicar la existencia de un tipo de objeto estelar previamente desconocido.
El objeto, bautizado como Askap J1832-0911, se encuentra aproximadamente a 16 mil años luz de distancia. Su descubrimiento fue posible gracias a la combinación de datos del radiotelescopio Askap en Australia y del telescopio de rayos X Chandra de la Nasa. Mientras que Askap detectó las ondas de radio con el patrón periódico de 44 minutos, la observación con Chandra reveló que la misma región también emitía rayos X con la misma periodicidad.
La emisión regular de señales desde objetos cósmicos no es inusual. Objetos como las estrellas de neutrones (púlsares) y algunos sistemas binarios (con agujeros negros o estrellas de neutrones en órbita) pueden producir emisiones periódicas. De hecho, la astrónoma Jocelyn Bell detectó en 1967 señales de radio rápidas y regulares, inicialmente consideradas como posibles señales extraterrestres (“Little Green Men”), que resultaron ser púlsares.
Sin embargo, Askap J1832-0911 se diferencia significativamente de los púlsares conocidos. Los púlsares son estrellas de neutrones que giran muy rápidamente, emitiendo pulsos en intervalos cortos, a menudo del orden de microsegundos. Su precisión es tan extrema que funcionan como “relojes” naturales en el universo.
En contraste, el nuevo objeto tiene un período mucho más largo, de 44 minutos. Debido a este largo intervalo entre pulsos, los investigadores lo clasificaron inicialmente dentro de la categoría de Transitorios de Período Largo (LPT por sus siglas en inglés), que son objetos que emiten pulsos de radio en escalas de tiempo que varían desde minutos hasta horas. La naturaleza exacta de los LPTs aún se desconoce.

Lo que hace que Askap J1832-0911 sea extremadamente diferente, incluso para un LPT, es la detección simultánea de emisiones tanto en ondas de radio (baja energía) como en rayos X (alta energía). La mayoría de los LPTs observados hasta ahora solo emiten en longitudes de onda más largas, como la radio. Ningún otro LPT conocido había mostrado señales energéticas como los rayos X.
Esta característica única es lo que más intriga a los astrónomos. Las explicaciones actuales para los LPTs, que incluyen modelos basados en magnetares (un tipo de estrella de neutrones con campo magnético extremadamente potente), sistemas binarios o enanas blancas, no logran explicar la combinación de emisiones de alta y baja energía observada en Askap J1832-0911.
Esto lleva a los investigadores a especular que el objeto podría representar un nuevo tipo de objeto cósmico o un fenómeno físico aún desconocido en el universo. El descubrimiento también sugiere que otros LPTs podrían estar emitiendo en longitudes de onda energéticas y que telescopios como el Chandra podrían usarse para buscar estas emisiones en objetos con pulsos de período más largo.
El estudio de Askap J1832-0911 y sus peculiares emisiones en radio y rayos X abre nuevas perspectivas y ayuda a los científicos a refinar el número de posibles fuentes que podrían generar tales señales. La búsqueda para comprender la verdadera naturaleza de este misterioso “faro cósmico” de 44 minutos continúa.