El sistema de recarga de
a través de Internet aún no está funcionando. Según pudo averiguar La Voz, volvería a estar habilitado desde el jueves, luego del ataque cibernético que afectó a la carga de saldo para pagar los viajes del transporte urbano de Córdoba, Salta, La Rioja y Tucumán.
La empresa Bizland, propietaria de Red Bus, informó este lunes que “el servicio está completamente operativo” en los puntos de recarga físicos, aunque advirtió que en algunos sitios la implementación del sistema puede sufrir algunas demoras.
Sin embargo, la carga a través de Internet sigue sin funcionar. Disponible desde agosto de 2020, los usuarios pueden ingresar fondos a la tarjeta Red Bus a través de Mercado Pago, Naranja X, Pago Mis Cuentas, Pagos Link, MoviPay, Tarjeta Cordobesa de Bancor, CargaAlToque y Puntos Quiero Galicia.
Fuentes de Bizland confirmaron que el sistema aún no está funcionando, y anticiparon que estaría nuevamente operativo desde este jueves.
En tanto, se espera que este martes comience a funcionar el sistema de descuento en las farmacias.
Bajo ataque
El jueves de la semana pasada, los servidores de Bizland fueron atacados por el programa malicioso LockBit.
Se trata de un software creado para bloquear el acceso a sistemas informáticos y pedir rescate. Lo que hace LockBit es impedir que se acceda a los archivos, y para poder volver a hacerlo, hay que pagar un rescate. Ese pago se suele realizar a través de billeteras virtuales de criptomonedas. Una vez que ese pago se realizó, se envía una herramienta que desencripta la información.
Según pudo saber La Voz, hubo un pedido de rescate a Bizland, pero la empresa se negó a pagarlo.
El sitio de seguridad informática Kapersky detalla que LockBit es un software malicioso diseñado para bloquear el acceso de los usuarios a los sistemas informáticos y pedir el pago de un rescate para restablecerlo.
Está activo desde 2019, y uno de sus ataques más conocidos fue al servicio postal del Reino Unido, Royal Mail, a principios de este año.
En la lista de ataques hay sitios, empresas y organizaciones de todo el mundo. En febrero de este año, atacaron a la aseguradora La Segunda, a la empresa de medicina prepaga Osde y al Grupo Albanesi, proveedor de gas.
Kapersky destaca que los objetivos viables “son aquellos que se sentirán tan obstaculizados por la interrupción, que preferirán una suma abundante, y que tendrán los fondos para hacerlo”, y que por eso, provocan ataques generalizados contra grandes empresas, desde el sector de la salud hasta instituciones financieras.
No se sabe quién está detrás, pero Kapersky señala que llamativamente no atacan en Rusia ni en países con buena vinculación con el Kremlin.
