Fue apenas una oración en el discurso de apertura de sesiones del Concejo Deliberante de Córdoba, el sábado por la mañana. El intendente Daniel Passerini, anunció como al pasar, la erradicación del cobro ilegal de estacionamiento en el parque Sarmiento. Y, en efecto, ya este domingo y lunes no había cuidacoches en el principal espacio verde de la ciudad.
“En el parque Sarmiento, un emblema de todos los cordobeses, hoy el estacionamiento es gratuito y el lugar una zona segura, gracias a la tarea conjunta de la Policía y de la Guardia Urbana”, afirmó el mandatario municipal. No fue una promesa: Passerini informó algo que ya estaba vigente.
La decisión se aplicó sin aviso previo y generó sorpresa entre los automovilistas, ya que hasta la semana pasada el cobro era una práctica común en el sector.
Los “naranjitas” solicitaban el pago por adelantado de montos que partían desde los $2 mil y que variaban según la “cara del cliente”.
Durante el fin de semana, La Voz recorrió el parque y pudo constatar que no había cuidacoches cobrando.
Desde la Municipalidad confirmaron que la medida es parte de una acción integral para recuperar el espacio público.
En ese marco, se reemplazó la cartelería existente que indicaba que el estacionamiento era tarifado, por nuevos carteles que aclaran que es libre y gratuito.
Además, se reforzó la presencia de la Guardia Urbana Municipal (GUM), de la Policía de Córdoba y de inspectores de Tránsito municipal.
Cómo se eliminó el cobro de naranjitas
El secretario de Gobierno de la Municipalidad, Rodrigo Fernández, destacó que se trata de un trabajo articulado con el Ministerio Público Fiscal (MPF), con la Policía de Córdoba y con distintas áreas municipales. “Nosotros tenemos que recuperar el espacio público para el uso de la gente, que hoy está ocupado por estos cobradores ilegales”, afirmó el funcionario.
Según explicó Fernández, la iniciativa se viene trabajando desde el año pasado y se desarrolla en conjunto con el Ministerio de Seguridad de la Provincia –a cargo de Juan Pablo Quinteros– y el fiscal Marcelo Fenoll, quien investiga el cobro indebido de estacionamiento en la vía pública.
La Municipalidad también trabaja en un abordaje social para brindar alternativas laborales a las personas que se dedicaban a esta actividad. En este sentido, el municipio dispone de un programa de inserción laboral para excuidacoches, quienes podrán acceder a capacitaciones y oportunidades en distintas áreas, como el mantenimiento de espacios verdes y el ordenamiento vehicular.
La erradicación de los naranjitas en el parque Sarmiento fue coordinada con la Secretaría de Seguridad, a cargo de Claudio Vignetta, que se encargó de garantizar la seguridad en la zona.
Asimismo, la Subsecretaría de Movilidad, conducida por Eduardo Ramírez, intervino con la Policía de Tránsito para ordenar el estacionamiento y la circulación vehicular tras la salida de los cuidacoches.
En tanto, el ente Biocórdoba, que administra el parque, colaboró con la renovación de la cartelería y el mantenimiento del espacio verde.
Fernández remarcó que “los espacios públicos recuperados deben ser disfrutados de manera gratuita”. Y aseguró: “No hay naranjitas ni estacionamiento medido; no cobra nadie”.
El funcionario admitió que, debido a la presión de los cuidacoches, había familias que decidieron dejar de frecuentar el parque Sarmiento y aseguró que para el intendente Passerini “este fue un tema prioritario”.
Según el secretario de Gobierno, la Municipalidad optó por un abordaje “silencioso e integral”, evitando enfrentamientos violentos con los cuidacoches.
“A diferencia de lo que ocurre en otras ciudades donde se apela a la violencia para erradicar la actividad, aquí buscamos una solución a través del diálogo y la articulación con distintas áreas”, explicó.
Promesa de extender la medida
La medida se extenderá a otras zonas de la ciudad donde también se registra cobro ilegal de estacionamiento. La próxima etapa se aplicará en barrio Güemes, donde la problemática se agrava durante la noche, y posteriormente en Nueva Córdoba.
También se evaluará la situación en corredores comerciales y áreas cercanas a hospitales, donde los reclamos de automovilistas por el cobro indebido son frecuentes.
“No corremos ni le quitamos el trabajo a nadie. Queremos reconvertir la actividad en algo que nos sirva a todos y que, a la vez, permita que la gente disfrute de los lugares públicos sin presiones”, sostuvo Fernández.
En ese sentido, indicó que la Secretaría de Políticas Sociales, a cargo de Raúl La Cava, trabaja en programas de contención y capacitación para aquellas familias que dependían de esta actividad.
En cuanto a la reacción de los vecinos y visitantes del parque, muchos destacaron el alivio de poder estacionar sin ser abordados por cuidacoches y sin sentirse presionados a pagar. “Siempre veníamos con el miedo de cuánto nos iban a cobrar. Ahora podemos disfrutar del parque sin preocupaciones”, comentó una familia que visitó el espacio el domingo.
Por último, el funcionario subrayó la importancia de la cartelería para garantizar la continuidad de la medida. “Es clave porque la gente tiene que saberlo, el inspector tiene que saberlo, el policía tiene que saberlo. Todos los que vengan después a cuidar estos lugares tienen que saber que está señalizado que es un espacio público libre y gratuito”, concluyó.
Ahora viene lo más difícil: que la medida se sostenga en el tiempo. En caso de intento de cobro indebido, hay que llamar al 911.
