En lo que va del año el rubro de bebidas es uno de los más afectados por la pérdida del poder adquisitivo y la caída general en el consumo. Desde el Centro de Almaceneros y Comerciantes Minoristas de la Provincia de Córdoba informaron a La Voz que la baja en el consumo de estos productos afecta principalmente a los comercios de cercanía.
Según un informe del Departamento de Estadísticas y Tendencias de la entidad, en febrero se notó una notable disminución en el volumen de venta de bebidas alcohólicas en comercios de proximidad, como almacenes, autoservicios y vinotecas. En comparación con el mismo mes del año anterior, la caída es del 34,6%.
La bebida predilecta por los cordobeses, como el fernet de primera marca, sufrió una disminución en las ventas del 53%. En contraste, las segundas marcas de la misma bebida registraron un aumento del 14% en durante igual período.
Por su parte, las bebidas blancas, entre las que se incluyen el vodka, el gin, el whisky, entre otras, también experimentaron una notable reducción en la demanda del 62%.
Además, los vinos finos evidenciaron una caída del 27%, mientras que los vinos en su formato tetra brik se vendieron un 42% menos.
En tanto, las ventas de cervezas y gaseosas también se vieron afectadas, con una baja del 46% y el 48% respectivamente.
Estos datos reflejan una tendencia generalizada de reducción en el consumo de bebidas. Las cifras reflejan una marcada preferencia por productos de segunda marca en el caso del fernet y un declive generalizado en el consumo de vinos, cervezas y gaseosas.
Uno de los motivos que explica esta retracción en el consumo es el fuerte incremento en los precios. Si tomamos como referencia el mes de noviembre de 2023 hasta hoy, se nota un aumento promedio superior al 130% en todas las bebidas relevadas.
Dentro del mercado de bebidas, el fernet experimentó el menor aumento, con un 132%, seguido de los vinos finos con un incremento promedio del 165% en dicho periodo. Por su parte, los vinos en su formato tetra brik sufrieron un alza del 138%, mientras que las cervezas registraron el mayor incremento de precios, con una suba del 172%. Por último, las gaseosas subieron el 143%.
Germán Romero, director del Departamento de Estadísticas y Tendencias del Centro de Almaceneros sostuvo que si se compara con los alimentos, la caída en la demanda de bebidas es menor es entre un 10% y 15% menor.
Pero aseguró que ello una explicación. “Quien compra la mayoría de bebidas blancas, fernet, vino fino, es un sector social más elevado, que también ha recortado sus consumos, aunque en un escalón inferior al resto”, indicó Romero.
“En general, todas las clases sociales han recortado sus consumos”, explicó el director de la entidad y remarcó que la baja en la compra de bebidas se refleja con más intensidad en los estratos superiores, ya que en los más bajos el consumo de estos productos tiene menor relevancia.
En supermercados y autoservicios
Por su parte, Víctor Palpacelli, presidente de la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (Fasa), manifestó a La Voz que el rubro bebidas también se vio afectado en cuanto a las unidades de venta.
“La caída interanual promedio en nuestro sector es del 7%, mientras que en las bebidas alcohólicas ronda el 10%” indicó Palpacelli.
En cuanto a los productos que más sintieron la recesión, el dirigente destacó “los cortes de vinos más caros o premium “.
Según datos de la consultora Scentia, el canal “self service” mostró en enero un fuerte declive en la venta de bebidas alcohólicas en hipermercados, supermercados y autoservicios en todo el país. Respecto al mismo mes del año anterior, la demanda se desplomó un 11,3%, siendo ésta la categoría de mayor baja en el consumo. Por su parte, las bebidas sin alcohol retrocedieron un 2,4%,
Las venta de bebidas con alcohol muestra una caída mayor del 17,3% en las grandes cadenas de supermercados, mientras que en los autoservicios independientes la disminución en la demanda es más moderada, ubicándose en el 4,6%.
