Luego de la denuncia ante la Justicia por parte de la familia de la nena que murió ahogada en el río Los Chorrillos, en Cabalango, en el Valle de Punilla, provincia de Córdoba, la comuna de esa localidad manifestó, a través de un comunicado, que actuó con “toda pericia y diligencia” en el hecho.
La carta fue difundida por redes sociales y lleva la firma de la jefa comunal, Carla Bruno, y otros integrantes del Ejecutivo comunal. En ella se detalló que al momento del rescate, la comuna dio intervención a Defensa Civil y Inspectoría General asistidos por Bomberos Voluntarios de Tanti y Villa Carlos Paz, y la Policía. Además actuó Duar, Etac y profesionales del dispensario local.
También, dijo que asistió “en todo momento” a los familiares y coordinó las tareas para que el personal de la comuna, Policía y Bomberos actuaran ante la urgencia.
A la vez, la comuna explicó que las fuerzas policiales solicitaron el servicio de emergencias de la municipalidad de Villa Santa Cruz del Lago.
Y luego, “cuando la situación ya era reversible se nos informó a través de la familia de la niña fallecida que no contaban con el servicio de sepelio por lo cual nos contactamos con el secretario de Gobierno de la ciudad de Córdoba (...) e inmediatamente se articuló el sepelio de la menor”.
Asimismo, afirmó que se puso a disposición de la Justicia, de la Secretaría de Instrucción de turno de Villa Carlos Paz, que investiga la causa bajo secreto de sumario.
Sin embargo, la secretaria de Gobierno de esa comunidad, Laura Illanes, denunció que la jefa comunal, quiso obligarla a firmar ese documento y por eso denunció coacción contra la presidenta Carla Bruno, entre otras autoridades.
Illanes sostuvo que fue citada de emergencia por la mañana para una reunión “para tratar temas referidos al deceso de la niña de 11 años el 14 de enero” y en la misma le presentaron una nota “a modo de descargo” en la que se hacía referencia “al correcto desempeño del personal de defensa civil y seguridad ciudadana de la comuna y las medidas de seguridad adecuadas que presentaría el balneario”. Seguidamente, denunció que le dijeron: “Firmá”.
La secretaria de Gobierno se negó a firmar dicho documento y según consta en la denuncia policial con intervención de la justicia, Bruno le habría dicho: “Firmá la nota, sino fuiste vos la que lo llamó a (el abogado Carlos) Nayi. Firmá o ¿querés fundir a la comuna?”
El hecho
El caso tomó relevancia cuando el padre de la niña de 11 años, Fernando Saldaña, dijo que su hija Jamín murió al ser chupada por un caño, razón por la cual el martes 30 de enero se presentó en Tribunales de Córdoba, junto a su abogado querellante, Carlos Nayi, para que la justicia determine qué sucedió el 14 de enero en la localidad de Punilla.
La fiscal Silvana Páez, o a quien se designe tras la feria judicial –posiblemente Jorgelina Gómez o Ricardo Mazzuchi– deberá determinar si la existencia de un caño y una fuerza de succión en el muro de piedras provocó la muerte de Jazmín, como denunció públicamente su familia.
