La provincia de Córdoba tiene las primeras muertes por dengue: dos mujeres de 75 años, y el número de infectados alcanzó los 3.434 casos. Ante este panorama, los especialistas recalcan a la población el refuerzo en la prevención ante el mosquito Aedes aegypti, transmisor de la enfermedad.
¿Cómo controlar la propagación del mosquito? ¿Qué medidas tomar en el hogar? Son algunas de las preguntas que responde Martín Pages, director de la Diplomatura de Manejo Integrado de Plagas de la Universidad Blas Pascal (UBP).
Para Pages hay dos acciones fundamentales que hay que tener en cuenta para combatir el mosquito: la más importante es el control biológico, que es el control de las larvas en los espejos de agua, y no sólo en las aguas limpias, sino también en las sucias.
Esa revisión se hace con la aplicación del Bacillus thuringiensis svar. israelensis (Bti), un larvicida eficaz y seguro para controlar las poblaciones de mosquitos. De esta manera, se logra frenar el 60% de propagación contra un 10% que se puede lograr con la fumigación. “El control es muy efectivo y el descacharrado también ayuda”, afirmó.
A su vez, remarcó la importancia que tiene saber cuándo hacerlo y dónde. El mosquito intenta reproducirse entre los cuatro y los siete días después de que llovió. “El Aedes aegypti coloca sus huevos de manera vertical, sobre los bordes de los recipientes. Cuando llueve, el agua toma contacto con la cáscara del huevo, este eclosiona y ahí es donde sale la larva”, contó.
Una vez adulto, busca reproducirse –destacó el especialista– y es principalmente la hembra la que pica para lograrlo.
Entonces, para atacarlos es necesario hacerlo por la mañana temprano, entre las 6 y las 8, y a la noche, entre las 19 y las 21, horarios que recomendó Pages para hacer las campañas de fumigación con productos químicos.
Cuando termina de llover, hay que colocar el herbicida en todos los focos de agua: a orillas de la Circunvalación, en los parques y en los paseos públicos, entre otros lugares. “Es ahí donde va a ir el mosquito. La larva del mosquito come el Bacillus que está en el agua y este forma unos cristales que perforan el intestino del mosquito y evita que complete su ciclo de vida”, apuntó.
Otra de las acciones que consideró menos efectiva, con un 10% de resultado, es el control por fumigación. “Porque es una cuestión de supervivencia, por el horario en que se fumiga. La clave es tener el control del comportamiento de plagas”, indicó.
También resaltó que el descacharrado es otra de las acciones efectivas con las que se evita la proliferación de las larvas.
Asimismo, subrayó que en Argentina el sistema de salud para prevenir el dengue es precario, contrario a Brasil, país donde hace años que se hacen controles biológicos y hay campañas gratuitas de vacunación contra la enfermedad.
Acciones en el hogar
Pages dio una serie de recomendaciones para los hogares y dijo que es fundamental el descacharrado, no sólo en el exterior (revisar los tanques, el techo, los receptáculos de agua), sino también en el interior de las viviendas, y los controles en las piletas, cuidando de que estas tengan suficiente cloro.
“Es importante pensar en los niños y en los adultos mayores. Son los que menos lo perciben; cuando los niños están jugando, no se dan cuenta de que están siendo picados por los mosquitos. Tienen que estar protegidos con repelentes”, recomendó.
También fomentó el uso de las mallas mosquiteras para evitar el ingreso nocturno de los mosquitos, sobre todo cuando se ventila el hogar.
Además, agregó que los espirales, las pastillas y los insecticidas también suman como medida de prevención, y al ser productos químicos se debe tener precaución. Sobre todo quienes sufren alergias, y en el caso de embarazadas, “no cualquier repelente les hará bien”.
Síntomas de la enfermedad
La directora del hospital Rawson de Córdoba, Claudia Toledo, subrayó que los principales síntomas del dengue son los siguientes: fiebre de menos de cinco días de evolución, cefaleas, dolor detrás de los ojos, malestar general, dolor muscular y dolor articular. Otros síntomas que pueden manifestarse son sarpullidos, mucho decaimiento, náuseas y vómitos.
Pero también dijo que hay que prestar atención a los síntomas de alarmas como dolor abdominal, diarrea, petequias (pintitas rojas en la piel), sangrados de encías al cepillarse los dientes, ginecológicos o digestivos, y somnolencia. Y agregó que la enfermedad se manifiesta tanto en niños como en adultos.
Además advirtió que las personas que tengan estos síntomas deben recurrir al médico, quien le solicitará un laboratorio. “El dengue genera alteraciones en la sangre y hay que controlar. Por ejemplo: aumento de hematocritos y disminución de las plaquetas”, indicó.
“El dengue es una enfermedad que puede evolucionar de manera grave en algunas personas. Sobre todo en aquellas que tienen comorbilidad o alguna condición de riesgo. En estos casos, deben extremar los cuidados y realizar controles médicos”, expresó Toledo.
Asimismo, explicó que el tratamiento del dengue es sintomático, se hace mediante medicación para calmar la fiebre, disminuir la picazón, y es importante la hidratación con líquidos.
A su vez, manifestó que “en esta época del año se conjugan varias situaciones, como el clima, la lluvia y la humedad, lo que provoca un ambiente propicio para la propagación de los mosquitos y, por ende, de la enfermedad”.
Y recalcó que para tener ambientes libres de mosquitos lo ideal es usar telas mosquiteras, insecticidas en el domicilio, repelentes, y mantener el peridomicilio libre de recipientes que acumulan agua (macetas, tachos, cubiertas, entre otros), y mantener pasto y plantas podados.