La notoria y cada vez más pronunciada baja en la edad promedio de los fallecidos por Covid-19 es uno de los datos salientes que deja la segunda ola del virus.
Algunas cifras alcanzan para dimensionar ese cambio. En Córdoba, la edad promedio de los muertos durante todo un año de pandemia (entre marzo de 2020 y marzo de 2021) fue de 72,6 años. Pero en abril pasado había descendido a los 69,8 años. Y, en mayo, ya fue de 67,2 años.
A la vez, los menores de 60 años que explicaban el 11% de muertes por coronavirus del total en esta provincia, de marzo a marzo, pasaron a representar el 28,5% en mayo último: casi el triple.
Un cambio notorio
Dicho de modo sencillo: durante un año de pandemia, uno de cada 10 fallecidos por coronavirus era menor de 60 años. Ahora, son casi tres de cada 10.
Las razones, según apuntan los especialistas, hay que buscarlas a dos puntas.
Una es el impacto de la vacunación, que en la primera etapa ha priorizado a los adultos mayores. Y otra, que con la segunda ola ha aumentado la tasa de contagios entre los más jóvenes, lo que ocasiona además cuadros más severos que el año anterior en pacientes de 40 a 60 años.
En descenso
Los mayores de 60 años, durante un año, fueron el 88,8% de los fallecidos en Córdoba. En mayo último, en cambio, representaron el 71,5%.
En la franja de 50 a 60 años, de explicar el 7% de las muertes en un año, se pasó al 18% del total.
También casi se ha triplicado la tasa entre las personas de 40 a 50 años de edad, que pasaron de ser el 2,5% en todo un año al 6,3% del mes de mayo.
Los de 30 a 40 años subieron del 1% al 2,6%. Y los de 18 a 30 años pasaron de ser el 0,3% del total de fallecidos al 1% en el último mes.
En niños
Una diferencia llamativa también aporta la mortalidad detectada en menores de 18 años. Durante un año entero, hubo un caso (una nena de 3 años). Pero sólo en mayo pasado se agregaron tres (un bebé de 15 días, uno de 9 meses y un adolescente de 16 años).
En 14 meses de pandemia, fallecieron cuatro menores de 18 años en Córdoba.
Menos muertes que en octubre
Mayo fue el peor mes de la pandemia en casos y en internaciones. Pero no lo es en número de muertes. En mayo, con 526 fallecidos, se dio en Córdoba un promedio de 17 por día.
Pero está lejos de octubre de 2020, cuando se reportaron 1.100 muertes (35,5 diarias). También noviembre había sido más alto, con 23,6 fallecidos por día.
La situación de más casos pero menos muertes también se explicaría, sobre todo, por la incidencia de la vacunación.
De todos modos, por la notable suba de contagios, los fallecidos durante 2021 vienen en franco ascenso: de los 5,5 por día de marzo se saltó a los 12 de abril y se escaló hasta los 17 diarios de mayo.
Mientras, en hospitales y clínicas se acentúa el asombro por el aumento de casos de personas de entre 40 y 60 años con cuadros graves y en terapia intensiva, incluso aunque no presenten comorbilidades previas.
Razones
Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, la letalidad (decesos en relación con casos detectados) está en baja en todo el país. Entre los mayores de 60 años, esa tasa descendió del 15,9% en 2020 al 8,4% en lo que va de 2021. Entre los menores de 60 años, también bajó, pero mucho menos: del 0,6% al 0,4%.
Para Jorge Aliaga, físico e investigador del Conicet, el avance en la vacunación está produciendo que haya “menos gente internada en terapia y menos gente fallecida de edades avanzadas”. Interpretó que “comparando la proporción de fallecidos por rango etario de ahora con los de noviembre y diciembre pasados, vemos que, si se hubiera mantenido la proporción de fallecidos mayores de 70 años con respecto a los menores de 50, hoy habría más de cinco mil fallecidos mayores de 70 más que los que contamos en el país”.
También Aliaga planteó que, aunque la situación sanitaria en Argentina hoy es muy compleja por la cantidad de contagios y de internados, con ese actual nivel de infectados el país estaría ahora “mucho peor si no se hubiera vacunado”.
