La gestión municipal defendió la mudanza de la feria de Las Heras cerca del parque, en un tramo de la avenida Costanera que los fines de semana se cierra al tránsito vehicular. Se hizo un primer ensayo hace dos semanas, y el último sábado y domingo se instaló con todos los servicios de apoyo y las carpas con toldos blancos que provee la Municipalidad de Córdoba.
Se instalaron 350 puestos, con tablones y percheros.
El secretario de Políticas Sociales municipal, Raúl La Cava, argumentó a favor de la decisión con diferentes razones. En primer lugar, señaló que esta ubicación no tiene frentistas ni complica el tránsito, a diferencia de la locación anterior, en una zona cercana que tiene frentistas que se quejaban y boliches que durante la noche del sábado exigían que se liberara el espacio que ocupan las estructuras de los puestos.
Además, explicó La Cava que en este nuevo lugar no se cortan ni la ciclovía ni se invade el parque, porque se usa un tramo de Costanera que igual se cierra los fines de semana al tránsito, que se desvía hacia Las Heras.
En el espacio anterior se tenía que cortar Las Heras y hacer un desvío por calles interiores de barrio Independencia, saliendo recién a un costado del nuevo edificio del Concejo Deliberante, para retomar Costanera o cruzar el puente hacia el área central de la ciudad.
Y, finalmente, el secretario dijo que el paseo aportaba valor a la experiencia del vecino en el espacio verde, con una opción de compras accesible, a la vez que puede mejorar las ventas de los feriantes, que están ahora más cerca de donde se concentra el público.
Contra las críticas, La Cava aseguró que no se estorba la bajada al río ni el uso de la ciclovía. Y esgrime los resultados de una encuesta que hicieron desde la secretaría entre los usuarios del parque en estas primeras jornadas de mudanza que, en general, aceptan y hasta ven positivo el cambio.
Según esta encuesta, el 69% no ve nada negativo en que se haya sumado la feria; y entre quienes señalan algo malo, el 14% se queja de la pérdida de lugar para hacer deporte y el 10% marca que se genera más basura. Cerca del 90% dijo que hizo alguna compra en la feria el día que se lo consultó o en alguna otra ocasión, y el 65% señala que “aporta valor”. Lo más valorado de lo que ofrece la feria es la ropa de segunda mano, en buenas condiciones, con 73% de las adhesiones, y el 95% afirmó que recomendó su visita a otras personas.
En una recorrida por el lugar, el último domingo, La Voz dialogó con algunos vecinos que disfrutaban de la tarde en el parque, quienes sí señalaron algunos aspectos críticos.
Algunos plantearon que la fila de puestos dejaba sin vista al río al parque y que generaba una sensación de estar “más encerrado”, otros se quejaron de que el mayor movimiento dejaba muy poco lugar para caminar o sentarse; y, por último, otros se quejaron de que había puestos con música a alto volumen.
“Estas ferias son trabajo. Si no son el principal ingreso, aportan un complemento que hoy es indispensable para estas personas. Tenemos 117 paseos populares en la ciudad funcionando, ordenados, que tienen 5.883 feriantes registrados y un alcance en término de ingresos que se extiende a 8.475 personas, porque varios puestos son atendidos por más de una persona. Casi el 80% de los puestos son atendidos por mujeres, que son jubiladas, docentes o tienen otros trabajos y emprendimientos que se complementan con lo que pueden hacer en la feria”, justificó La Cava.
Además de Las Heras, el municipio interviene en las ferias de San Vicente, plaza Jerónimo del Barco (en Alberdi), plaza Alberdi (en General Paz) y Villa El Libertador. Asiste con baños químicos, sonido, algunos equipos y el cuidado de la guardia urbana a varias más, que, salvo la feria de la plaza de Alta Córdoba, no “invaden” plazas ni espacios verdes.
Lo de la plaza de Alta Córdoba es idiosincrático: los puestos hace años que se ubican del mismo modo y como las veredas son anchas, no estorban otros usos, explicaron desde el municipio.