La Policía detuvo este martes en el centro de Córdoba capital a una pareja que estaría vinculada a la desaparición, en Traslasierra en 2014, de Silvia Gloria Gallardo (34). Se trata de la hija de la víctima y su concubino.
La familia de Gallardo siempre apuntó al yerno de la mujer, con quien guardaba una marcada tensión. Pero nunca se ordenó la detención del joven, que mostró luego de los hechos conductas inquietantes, para luego desaparecer de la zona, que se vio conmocionada por los hechos.
En febrero de 2026 prescribía la causa. Diversas manifestaciones se hicieron en estos años pidiendo Justicia por la mujer.
La fiscal Eugenia Ferreyra, quien tomó el caso hace unas semanas, ordenó la detención, que fue ejecutada por miembros de la Departamental San Javier de Policía.
¿Femicidio y matricidio?
Yamila Micaela Gallardo (29) y Hugo Alberto Suárez (33) fueron encontrados y detenidos en el centro de Córdoba capital. Según los familiares de la víctima, desparecieron de Traslasierra y en estos años cambiaban frecuentemente de domicilio. Actualmente, la joven trabajaba en una panadería y el hombre en una empresa de seguridad.
El informe del Ministerio Público Fiscal expresa: “Según el decreto firmado por la fiscal, existen elementos suficientes para sostener que la víctima fue asesinada en el contexto de una situación de violencia familiar y de género, y que su hija Yamila y su yerno Hugo habrían actuado como coautores del hecho”.
Ferreyra aclaró a La Voz: “La calificación legal es la siguiente: homicidio calificado por el vínculo para ella, y homicidio calificado por el vínculo y por mediar violencia de género (femicidio) para él; a Suárez se le hace extensiva la agravante del vínculo por el conocimiento previo al hecho del mismo”.
Fin del silencio
Silvia Gloria era la tercera de ocho hijos de una familia de Yacanto, y trabajaba en Córdoba capital , a donde debía viajar el 11 de febrero de 2014. Pero se cree que nunca tomó el colectivo que debía transportarla desde Traslasierra. Sus familiares creen que su yerno ya la había matado, para arrojarla a un profundo pozo cercano a su casa. Nada más se supo de ella en 11 años. Según la familia, los procedimientos investigativos de la Justicia fueron insuficientes o ineficaces.
“Después de tantos años esperando un gesto de la Justicia, hoy creemos que estamos un poco más cerca de encontrar la verdad, por fin una buena noticia, agradecemos a la fiscal Ferreyra y a la policía” dijo Analía Prado, la hermana de Gloria que denunció la desaparición, y que en estos años encabezó los reclamos de Justicia.

Los ahora detenidos tenían entonces 17 y 21 años, y una niña pequeña de un año y meses. Vivían en la casa que Gloria tenía en su pueblo natal. Ese verano ella había regresado de vacaciones por un par de semanas, y había mantenido fuertes discusiones con su yerno. “Él quería tener el control de la casa, que no era de él, mi hermana dijo que le iba a pedir que se fuera, y al otro día desapareció” explica hoy Analía. La mujer describe a Suarez como “extraño y violento”.
Después de la extraña desaparición de Gloria, su yerno mató y exhibió a todas las mascotas de la mujer (cuatro gatos y tres perros). También dispuso cambios en la casa y vendió objetos de su joven suegra, como sabiendo que ella ya no volvería.
Inicialmente, la causa estuvo en manos del fiscal Raúl Castro, quien imputó a la pareja hoy detenida por falso testimonio. En 2019 asumió la investigación Lucrecia Zambrana. Recientemente, la familia de la mujer desparecida denunció “inacción” de la Justicia. En mayo, la fiscal se apartó de la causa por diferencias personales con el abogado de la familia, Germán Romero Marcón.
La detención del martes marca un hito en un proceso que durante años no tuvo novedades.