A más de una semana del colapso cloacal en Villa Páez y Alberdi, que derivó en la declaración de la emergencia ambiental, social y sanitaria para toda el área afectada, el municipio capitalino aún no pudo concluir el diagnóstico definitivo sobre la rotura del caño en la esquina de Arturo Orgaz y Libertad, ni cuánto tardará la obra de reparación.
“Todavía la empresa no pudo evaluar la longitud del ducto a reparar y con ello el tiempo de la obra”, le dijo este martes a La Voz, Roberto Frezzi, director de Redes Sanitarias y Gas de la Municipalidad de Córdoba.
El funcionario agregó que a partir de este miércoles comenzarán a operar con maquinaria pesada en la zona para atacar los dos frentes de conflicto: la rotura en Orgaz esquina Igualdad y la obstrucción de Igualdad y Silvestre Remonda. En ese tramo de casi 200 metros buscarán determinar el estado de toda la red. Los trabajos deben hacerse con sumo cuidado porque se trata de una zona crítica.
“Mañana –por el miércoles– van a empezar a operar dos retroexcavadoras grandes para dar con el caño viejo. Es una intervención compleja, la idea es cambiar lo menos posible, solamente tocaremos lo que no está en buen estado, así no demoramos la obra y podemos reconectar el sistema”, dijo el funcionario.
Empresas
La firma Aclade S.R.L. que estuvo trabajando en la “zona cero” desde fines de septiembre y que intervino durante la primera etapa del desborde terminó ayer sus trabajos. Continuará operando para el municipio en el marco del contrato de atención de emergencias cloacales junto con otras empresas.
De acuerdo a lo que se señalaron los operarios que están en el lugar, la zona crítica ya está apta para ser intervenida. Mientras tanto, el caño de cloacas 700 milímetros sobre calle Orgaz permanece abierto, pero apuntalado. “La red cloacal funciona sin ningún tipo de problemas aguas abajo”, agregó Frezzi.
Desde hoy está operando en la zona la firma Supercemento, que lleva adelante la obra de la nueva planta de Bajo Grande y su conexión con la vieja Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar). La firma tendrá a su cargo el trabajo final de reparación, confirmó el municipio.
Sin responsable
Todavía no hay indicios sobre la empresa privada que habría realizado el primer pozo en esa esquina, que según coinciden desde la Municipalidad y la contratista estaba claramente delimitado antes de que se interviniera en el lugar.
Una hipótesis que surge desde estos sectores es que la zona se encontraba fuertemente intervenida desde hacía ya varios años, con diferentes parches y reparaciones sobre la carpeta asfáltica.
Eso explicaría en parte la fragilidad del terreno. Como ejemplo vale un antecedente: en 2016 el acoplado de un camión con 27 mil kilos de arena quedó trabado en un cráter sobre calle Arturo Orgaz de casi un metro y medio de profundidad.
La Justicia ya tendría en su poder las filmaciones para analizar cómo se inició el desborde cloacal y que empresa produjo la rotura del caño.
La causa que se inició a partir de la denuncia del Instituto de Protección Ambiental y Animal (IPA) de la Municipalidad de Córdoba, la lleva adelante la fiscalía de instrucción a cargo de Tomás Casas, quien deberá determinar si considera que hubo delito o no ante el desborde.
Mientras tanto, cuadras arriba en la esquina de Páez Molina y La Tablada sigue funcionando un tapón a la red cloacal donde se continúa vertiendo aguar servidas que van a parar al río Suquía.
Ante el reclamo de los vecinos el lunes se canalizaron los efluentes con murallones tipo New Jersey. De acuerdo con pobladores de la zona y operarios que trabajan en la obra, la reparación puede demorar cerca de un mes.
