Un estudio internacional liderado por la Universidad de Granada (UGR) demostró que la melatonina, conocida por su papel en la regulación del sueño, también puede restaurar la composición de las fibras musculares y proteger al músculo esquelético del deterioro provocado por la obesidad y la diabetes tipo 2, una condición conocida como diabesidad.
Los resultados, publicados en Free Radical Biology and Medicine y Antioxidants, revelan que esta hormona mejora la función mitocondrial, reduce el estrés celular y previene la muerte de las células musculares, abriendo una nueva vía terapéutica para combatir esta enfermedad metabólica.
Cómo actúa la melatonina en los músculos afectados por la diabesidad
El estudio, dirigido por el catedrático de Farmacología Ahmad Agil, demostró que la administración de melatonina en roedores obesos y diabéticos durante 12 semanas favoreció la transformación de fibras musculares rápidas (glicolíticas) en fibras lentas (oxidativas). Este cambio optimiza la producción de energía y protege el músculo del daño causado por la ‘diabesidad’.
El músculo esquelético, que representa más del 50% del peso corporal, está compuesto por tres tipos de fibras:
- Fibras rojas (oxidativas): de contracción lenta y con alta capacidad para quemar grasas.
- Fibras blancas (glicolíticas): de contracción rápida, pero menos eficientes energéticamente.
- Fibras intermedias, que combinan características de ambas.
Con la obesidad y la diabetes tipo 2, las fibras oxidativas tienden a disminuir, afectando la capacidad del músculo para quemar grasas y generando una mayor acumulación de tejido adiposo. La melatonina logró revertir este proceso, aumentando las fibras oxidativas y reduciendo las glicolíticas, lo que favorece el uso de grasas como fuente de energía y reduce la obesidad.
Un efecto similar al ejercicio aeróbico prolongado
Los investigadores encontraron que la melatonina mejora la función mitocondrial y regula los niveles de calcio en las células musculares, reduciendo el estrés celular y previniendo la muerte programada de las células.
“Descubrimos que la melatonina restablece los niveles de calcio en las mitocondrias y el retículo endoplasmático, lo que contribuye a reducir el daño celular”, explicó el doctor Agil.
Estos resultados refuerzan hallazgos previos de los últimos 15 años, y sugieren que la administración de melatonina podría ser una estrategia efectiva para mejorar la salud muscular en pacientes con obesidad y diabetes tipo 2.
Nuevas perspectivas terapéuticas con melatonina
El estudio abre la posibilidad de desarrollar tratamientos basados en la administración farmacológica de melatonina para prevenir el deterioro muscular en personas con diabesidad.
Aunque estos hallazgos son prometedores, los expertos destacan la necesidad de más estudios en humanos para confirmar sus efectos y establecer dosis adecuadas para su uso clínico.