Varias revelaciones surgieron en la compleja causa que investiga la muerte de bebés en el hospital Materno Neonatal de la ciudad de Córdoba. La investigación que lleva adelante el fiscal Raúl Garzón comenzó indagando las causas de los fallecimientos de dos bebés, ocurridos el 6 de junio. Y los motivos por los que otra niña quedó con secuelas ese día.
Cuando se hizo cargo de la investigación, el 4 de julio de este año, Garzón se encontró con que autoridades del hospital y funcionarios del Ministerio de Salud provincial ya venían investigando esas muertes, por lo menos desde mayo. En esa pesquisa administrativa, Salud elaboró un listado de 13 casos, desde marzo hasta junio, contando cinco fallecimientos y ocho víctimas de un supuesto ataque intencional.
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Garzón imputó por homicidio calificado a la enfermera Brenda Agüero por los dos casos de junio, con los que sí contaba autopsias. Ahora intenta trazar una línea de tiempo para saber si existió un patrón común con las demás. Se espera que esta semana se expida sobre la situación de Agüero, detenida el 19 de agosto. También puede ampliar imputaciones a funcionarios del Ministerio de Salud provincial, por demorar la denuncia judicial o por entorpecer la investigación.
Lo exótico de la foto
El abultado expediente pudo tomar la foto del momento, en el hospital particular donde surgió la denuncia. En esa especie de radiografía, Garzón se encontró con cuestiones puntuales que sucedieron en ese centro de salud. Pero también descubrió aspectos estructurales: una realidad que podría haberse encontrado en otros hospitales.
Comencemos por la cuestión excepcional. Por lo exótico de la foto.
Durante el período analizado, se registraron más muertes en esta maternidad. Según datos del Registro Civil provincial, que fueron cotejados por el Ministerio de Salud provincial, durante el primer semestre del año se registró allí un exceso de muertes superior al 50 por ciento. Fueron 28 fallecimientos, en comparación con los 19 del mismo período de 2021 y los 14 de 2020.
Los números son indicios de que algo excepcional estaba pasando ahí.
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Universo paralelo
Garzón tomó la causa sospechando principalmente de Brenda Agüero. La enfermera ya había sido apuntada por autoridades del Ministerio de Salud provincial, que realizaron una investigación administrativa, antes de la intervención judicial. De esa pesquisa surgió el número original de los 13 afectados.
Sin embargo, conforme avanzó la investigación, fueron apareciendo cuestiones más estructurales.
En el expediente judicial, consta que tanto el exministro Diego Cardozo como la exdirectora Liliana Asís trataron de unificar el discurso que explicara la muerte de los bebés. Que quisieron acordar de antemano qué iban a decir y qué no ante el fiscal, de coordinar la explicación con otros profesionales, para que “no acusen ningún problema de mala praxis”.
Estas prácticas unificadoras del discurso oficial eran comunes en el ministerio, antes de que estallara la tragedia del Neonatal. Incluso Cardozo, cuando era secretario de Servicios Asistenciales, había firmado un memorando que prohibía a los directores y subdirectores de los hospitales provinciales hablar con la prensa sin autorización previa de la cartera sanitaria.
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¿Quién controla la matrícula?
Otro de los interrogantes que surgen en la causa es quién controla la matrícula de enfermería y la calidad de la formación de esos profesionales.
A diferencia de los médicos o bioquímicos, por ejemplo, enfermería no cuenta en Córdoba con una entidad deontológica que regule la matrícula. Esta función está a cargo del Ministerio de Salud, el mismo que contrata a los agentes para los hospitales. No existe un consejo independiente.
En nuestra provincia hay múltiples instituciones públicas y privadas que forman agentes en enfermería. ¿Hay garantía de calidad por igual para todas?
La investigación de Garzón también reveló que la jefatura de áreas centrales, como Farmacia, era ocupada por contratados. Esto puede ser un indicador de una tendencia estructural: en los últimos años, los hospitales sumaron personal temporario, en detrimento de los de planta.
Finalmente, un dato no menor: en dos de los 13 nacimientos investigados, se detectaron infecciones de transmisión sexual en las mamás. Aunque estas no hayan sido la causa de muerte de los bebés, la foto muestra la altísima prevalencia que está teniendo hoy este tipo de enfermedades. Esta revelación podría darse en otras maternidades del país. El problema tiene alcance nacional.
Esta compleja causa sigue sumando pruebas. No se descarta que en los próximos días aparezcan más paisajes comunes y excepcionales de la foto del Neonatal.
