El cierre del colegio Xul Solar, en Río Cuarto, causó malestar en la comunidad de padres. En las últimas horas, se confirmó que la institución cerró sus puertas de forma definitiva.
La medida se debe por incumplimiento de pautas de infraestructura edilicia y por ser considerado insolvente financieramente. La resolución fue tomada por el Ministerio de Educación de la provincia de Córdoba.
Ahora, la Provincia trabaja para reubicar en otras escuelas de Río Cuarto a los más de 200 alumnos que tenía el Xul Solar, ubicado en barrio Abilene.
El colegio funcionaba en la ciudad desde 2016 y contaba con una habilitación provisoria. Como no corrigió las deficiencias que se observaron una y otra vez, desde la Dirección General de Institutos Privados de Enseñanza (Dipe) se procedió el miércoles a la clausura.
“En 2021 se le deniega la autorización para seguir funcionando por incumplimiento de normativa que incuye falta de adecuación de infraestructura edilicia e insolvencia. Presentan un recurso de reconsideración y continúan hasta este año en que se los siguió citando para que cumplimenten con las adecuaciones a la norma. Fueron nuevamente incumplidas, con lo cual se rechaza el recurso de reconsideración interpuesto en 2021 y se efectiviza la suspensión de la autorización precaria que tenía la escuela privada”, precisaron fuentes del Ministerio de Educación a La Voz.
En tanto, aclararon que se está trabajando para garantizar la escolaridad de los estudiantes y se acompañan a las familias en la reubicación de los estudiantes en otras instituciones de Río Cuarto.
“Sus estudios están convalidados. Estamos iniciando el proceso de reubicación de cara al 2023, ya que el ciclo 2022 se está cerrando”, remarcó al diario Puntal Claudia Reartes, la subinspectora de Nivel Inicial, Primario y Modalidad Especial.
Malestar entre la comunidad de padres y reunión
El cierre del colegio causó preocupación entre las familias de los estudiantes. En medios radiales, dijeron que se sentían “estafados” y que “ahora no sabían qué hacer”.
“No tenemos vacantes, no tenemos colegios. Esperamos que nos den alguna resolución”, detallaron.
Tras la polémica desatada, este jueves se concretó una reunión entre las familias y los directivos del Xul Solar. Pasado el mediodía, Luis Capelini, el dueño de esa institución, junto al abogado Ignacio Fernández Sardina, reconocieron una deuda importante con la Afip, y que el hecho de no tener el espacio que obliga el Ministerio de Educación de la Nación y el de la Provincia fue un factor gravitante para que se determine el cierre de ese colegio.
En tanto, trascendió que la semana próxima Capelini “estará devolviendo el dinero a los padres que ya hicieron su pago para la matrícula del 2023″.
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