El intendente de Villa Allende, Pablo Cornet, cuestionó a los manifestantes que se concentraron frente a la Municipalidad contra el proyecto de restricción de circulación en calles, que busca disminuir los robos en la zona en horarios nocturnos.
Cornet incluso puso en duda que sean vecinos de Villa Allende y manifestó que la protesta está “politizada” para oponerse contra la iniciativa oficial.
Con múltiples carteles, alrededor de 100 personas se acercaron a protestar sosteniendo como consigna: “No al cerramiento de los barrios”. La marcha implicó el corte de la mitad de la calzada en la Avenida Goycoechea en esa ciudad del Gran Córdoba.
La propuesta oficial del gobierno municipal, que se prevé exponer esta semana en el Concejo Deliberante local, consiste en el control de la circulación con el objetivo de reorientar el tráfico hacia las principales avenidas de la ciudad. Para ello se cerrarán las calles secundarias entre las 22 y las 6 mediante portones metálicos de dos metros de altura que restringirán el paso de vehículos y motocicletas.
Eso evitaría la dispersión de recursos y la concentración del control con cámaras y uniformados en las arterias principales. También impediría que los delincuentes utilicen las calles alternativas para ingresar y escapar del casco céntrico, de zonas comerciales, y de algunos barrios.
Qué dijo el intendente de Villa Allende
Cornet señaló a radio Mitre: “Es un reclamo que está politizado. Primero, esos vecinos que se manifestaron no estoy convencido que sean todos de Villa Allende, y segundo, la mayoría no son de los barrios afectados por la medida, y tercero, nunca nos llamaron ni nos preguntaron para hacer una consulta o sacarse las dudas sobre el proyecto”.
“En ninguna de esas reuniones se nos invitó a participar como Municipalidad o departamento Ejecutivo. Por lo cual uno dice, conocer el proyecto no es de su interés, sino que fue una medida para llegar a los medios y politizar el tema”, sostuvo.
Cornet consideró que la iniciativa de cerramiento beneficiará a los vecinos de los barrios afectados
“Esta medida primero requiere de un registro de oposición para que los vecinos titulares de los inmuebles se puedan oponer al proyecto. Si los vecinos no se oponen o no llegan al 40% los que se oponen, entonces ahí sí empezamos la ejecución y la implementación del proyecto”, sostuvo.
“Suponiendo que nos digan que sí o que quieren el proyecto en toda la zona en donde lo estamos proponiendo, van a ser cerca de 50 portones en total, pero estás hablando de más de 6.000 familias afectadas o beneficiadas por la medida”, agregó.
Explicó que de aprobarse el proyecto se ejecutaría entre febrero y marzo. Luego en paralelo se colocarías las cámaras y todo el sistema implementado estaría para junio.
Qué dijeron los manifestantes
“Queremos colaborar con la seguridad pero no queremos que nos encierran. No le encontramos lógica a que nos restrinjan el paso de noche y después quede todo libre. Les facilitamos el trabajo a los ladrones porque de día es cuando las casas quedan solas, cuando salimos a trabajar”, expresó Javier Saad, uno de los manifestantes.