La escuela Gobernador Justo Páez Molina, ubicada sobre calle Joaquín Monta al 1.350 de barrio Villa Azalais, de la ciudad de Córdoba, sufrió el robo de, aproximadamente, 50 metros de cable durante el último fin de semana largo. Y desde entonces está a oscuras y depende de la luz solar para dar clases, realizar las actividades deportivas, recreativas y de alimentación.
En el edificio funciona la primaria con 600 alumnos, en los turnos mañana y tarde, en jardín de infantes hay alrededor de 400 alumnos, y también está el Centro Educativo de Nivel Medio Adultos (Cenma), que funciona por la noche, pero ahora no tienen clases.
La escuela recibe a estudiantes no solo de Villa Azalais sino también de barrios aledaños, como General Mosconi y General Savio.
Además, la institución decidió modificar los horarios de la jornada extendida para aprovechar las horas de luz natural y que los chicos no se atrasen en las clases. También hay materias que dependen de aparatos electrónicos, pero ahora no los pueden usar.
Ante la falta de respuestas sobre cuándo se hará la obra para reponer el servicio, los padres de los chicos se manifestaron para visibilizar la problemática y pidieron que se resuelva con celeridad aunque sea con una obra provisoria.
Se sienten desprotegidos
Betiana Luna, mamá de una alumna e integrante de la cooperadora de la escuela, contó a La Voz que las autoridades del colegio hicieron todos los trámites en el área de infraestructura del Ministerio de Educación de la provincia, pero les dijeron que no hay fondos para reponer el servicio.
En más, “pensamos que como la escuela es un centro de votación iban a solucionarlo antes, pero no fue así, y esta vez la escuela no abrió el domingo de la elección. La gente votó en el secundario que funciona atrás”, dijo Luna.
A su vez, los padres contaron que los ladrones robaron los cables el jueves 13 de octubre a la noche. Ya en 2021 también sufrieron el mismo robo, pero está vez la obra era más segura: los cables pasaban por una canaleta y estaban tapados con cemento.
“Lo fueron sacando de la canaleta y levantaron el cemento. Los vecinos nos contaron que se escuchó una explosión y pensaron que eran los transformadores”, narró la mamá. Y relató que aparentemente los mismos ladrones les pusieron “unas tapitas” al tanque de agua del jardín de infantes y ahora, los chicos no tienen el servicio.
Luego del fin de semana largo, el martes 17, los estudiantes llegaron al colegio y se encontraron sin luz. Ahora, sienten que están desprotegidos y “a la buena de Dios” porque durante la noche la oscuridad es total.
Aunque la Policía a veces hace vigilancia- destacaron los padres-, sienten que eso no alcanza y piden un domo para tener mayor seguridad.
Sin gas y piden tener luz provisoria
Los padres contaron que desde hace cuatro años no tienen gas y a pesar del reclamo no logran la instalación. “En invierno pasan mucho frío, y para el verano la cooperadora compró ventiladores. Soy exalumna y siempre hicimos un esfuerzo, tanto padres, docentes y estudiantes para todo lo que necesita la institución”, manifestó Luna.
También explicó que el colegio tiene una banda de música que no puede ensayar debido a la oscuridad que existe en las instalaciones del colegio.
Oscar García, abuelo de un estudiante, dijo que están en una situación deplorable: “Uno no se anima a traer los chicos en estas condiciones y se va preocupado”.
En tanto, Alicia Avellaneda, concesionaria del kiosco, explicó que por la falta de gas tiene todo eléctrico, pero ahora no puede trabajar. “Agradecemos que no hace calor, porque no hay nada fresco”, apuntó.
Y pidió que más allá de que se haga la obra final, “queremos que hagan aunque sea algo provisorio. No se ve nada. Si la obra dura un mes no podemos estar sin luz en todo ese tiempo”.
Finalmente, los padres explicaron que siempre trabajan y se involucran en el colegio, lo hacen todo “a pulmón” y están “cansados de remar”.
Cómo seguirán las clases
Liliana Cesa, inspectora zonal 1191, confirmó que el colegio sufrió vandalismo y calcula que los delincuentes robaron aproximadamente 50 metros de cable.
“Hacemos un análisis diario de la situación, este martes el tiempo no nos acompaña. Hasta ayer (lunes) tuvimos bastante claridad. Tenemos que proteger a los niños y garantizar el dictado de clases”, remarcó la inspectora.
Además, agregó que “corrieron” los horarios y que en las aulas hay claridad suficiente. Si falta visibilidad se pensará en alternativas como la “escuela remota”, actividades domiciliarias o que las clases se retomen al otro día.
También, planteó que se están viendo estrategias como una conexión alimentada por las instituciones que están alrededor, pero por la complejidad de la situación no quieren ponerlas en riesgo.
“Hay que tener paciencia, la gestión ya está realizada desde el martes pasado. Y hay que esperar una respuesta. Es un trabajo que hay que hacerlo a conciencia y que perdure en el tiempo”, afirmó.
Por su parte, desde la Dirección de Infraestructura escolar del Ministerio de Educación adelantaron que los insumos ya están disponibles para reemplazar la instalación sustraída. Y mañana comenzarán con los trabajos para recomponer el servicio.
