Quebrados por el dolor, a seis años de su muerte, la familia de Tania Abrile (38) pide Justicia y espera por un juicio que aún no tiene fecha. La mujer, una reconocida artista plástica de Río Tercero, falleció tras consumir éxtasis en una fiesta electrónica en la ciudad de Córdoba, el 24 de julio de 2016.
Su caso se reactualiza ahora con la muerte, el fin de semana pasado, de otra joven cordobesa, María Agustina Di Martino (28), en similares circunstancias, pero en un predio de la localidad de Malagueño.
El abogado riotercerense Carlos Ríos, que representa a la familia de Tania Abrile, constituida en querellante, señaló a La Voz que en la actualidad hay tres procesos abiertos en la Justicia por ese caso de 2016: “Uno, por homicidio doloso, que está elevado a juicio ante la Cámara Sexta del Crimen, de Córdoba, en contra de Héctor Barreto, quien actuó en la emergencia como médico, sin serlo”.
A su vez, relató que “los otros dos procesos se siguen en contra de los organizadores del evento: Iván Aballay y Héctor Baistrocchi. Uno, por facilitación del lugar para el consumo de estupefacientes, y otro, por homicidio culposo”.
El letrado explicó que en esos dos últimos expedientes, la Cámara de Acusación dictó sentencia de sobreseimiento. Actualmente, por planteos de la querella están en el Tribunal Superior de Justicia con sendos recursos de casación, con la pretensión de revocar esos sobreseimientos y que lleguen también a juicio.
En 2016, en el Orfeo
Hace seis años que la familia de Tania quiere ver en el banquillo de los acusados a los responsables de los hechos que derivaron en la muerte de la joven. “Si la Justicia no hace nada, estas cosas feas seguirán ocurriendo”, apuntó Graciela Flores, madre de la fallecida.
Imploró por la celeridad del inicio del juicio por su caso y pidió que no sólo queden detenidos “los malditos” que venden las pastillas, sino todos los relacionados al contexto de estas fiestas electrónicas.
En este último tiempo, Graciela buscó refugio en su corazón ante tanto dolor, tomando contacto con padres de aquellos jóvenes que murieron en circunstancias similares, en este tipo de fiestas o eventos, como el caso de su hija. Los casos en el país se van sumando.
El domingo pasado, 24 de julio, la familia Abrile recordó otro aniversario de la fecha en que su hija perdió la vida por tomar este tipo de pastilla: “Maldita coincidencia”, graficó, sobre lo sucedido justo a los seis años con María Agustina, la joven de Río Segundo.
El éxtasis es el nombre popular con que se conoce a la metanfetamina (MDMA), una droga de diseño que pude provocar intoxicaciones y alteraciones cardiovasculares.
Varios juicios más por este tipo de casos en fiestas electrónicas están en proceso.
En ocho años, en Córdoba, ya murieron al menos cinco jóvenes por estas drogas, en semejantes contextos. Francisco Mignola (19) falleció en 2014, en Valle Hermoso; Tania Abrile, en 2016, en la ciudad de Córdoba; Daniel Rielo, en 2017, en barrio Talleres de la Capital; en 2019 se sumó Samir Velázquez (20), en una casona sobre el Camino a 60 Cuadras. Ahora se agrega María Agustina.
* Corresponsalía Río Tercero
