Bono para jubilados: cómo es el extra que analiza pagar el Gobierno en marzo

Tal como indica la actual Ley de Movilidad, en marzo habrá un nuevo aumento -el primero de 2023- en los haberes de los jubilados y pensionados, que se estima en torno al 17 ó 18%.

No obstante, el Gobierno nacional analiza el pago de otro bono para hacer frente a la inflación de estos meses. Esta claro que 2023 es un año electoral y el Gobierno estudia este bono “extra” para los adultos mayores. Cabe recordar que este bono -como en otras oportunidades- se pagó sólo a quienes cobran menos de dos haberes mínimos.

Este viernes 10 de febrero, el Gobierno anunciará cuál será el aumento que recibirán los jubilados y pensionados a partir de los haberes de marzo. Especialistas en temas provisionales aseguraron que podría estar por encima el 17%.

El dato que aun no está disponible para calcular el aumento es la evolución de los salarios que mide el Indec -a diciembre del año pasado- y que se conocerá el viernes.

AUMENTO PARA JUBILADOS EN MARZO DE 2023: DE CUÁNTO SERÍA

La Ley de Movilidad que está vigente indica que los aumentos trimestrales para jubilados, pensionados y titulares de asignaciones de Anses se calculan en base a un coeficiente elaborado en partes iguales por la recaudación previsional y la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte).

La cifra correspondiente a marzo-mayo se anunciará el próximo viernes 10 cuando el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dé a conocer el Índice de Salarios de diciembre. El último aumento fue en diciembre pasado del 15,62% para los haberes.

NUEVO AUMENTO: EN CUÁNTO QUEDARÍA LA JUBILACIÓN MÍNIMA

Hoy, la jubilación mínima es de $ 50.124 más un bono de hasta $ 10.000 que se pagó en diciembre, enero y febrero. La suba de marzo impactará solamente en el haber mínimo (sin extra), por lo que los jubilados cobrarán desde $ 59.146. De esta forma, tendrán menos plata que en meses anteriores.

De allí que se necesite un nuevo bono para intentar “compensar” la pérdida. Según adelantó Clarín, sería necesario un bono como mínimo de $ 12.000 mensuales, para llevar el ingreso total a $ 71.146.

Estos “parches” se han vuelto permanentes y en valores ascendentes. No pueden dejar de repetirse porque los aumentos por la movilidad quedarían anulados si esos jubilados pierden el cobro de los bonos.

En 2022, por ejemplo, hubo “parches” en abril, mayo, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre, sumados a los de enero y febrero de 2023. Sucede porque la fórmula de movilidad carece de una cláusula de garantía o compensación automática frente a la inflación. Y los bonos solo lo reciben los jubilados y pensionados de haberes más bajos, achatando la pirámide de ingresos del sistema.

Sin los bonos, la fórmula de movilidad en 2022 arrojó un 72,5% versus una inflación anual del 94,8%, es decir, una pérdida del 11,5%.