“Nos ha ventilado el alma”. Con estas palabras, Doña Jovita resumió lo que muchos sintieron en el Teatro Municipal de Río Cuarto. Entre risas y reflexiones, el entrañable personaje de José Luis Serrano y el gerontólogo Diego Bernardini desafiaron las ideas tradicionales sobre el envejecimiento y abogaron por otro paradigma: la nueva longevidad, una gran transformación en la forma en que se vive y se percibe el paso de los años.
El evento gratuito fue organizado por la Fundación Argentina para una Vida Plena, una entidad comprometida con la promoción de un envejecimiento activo y saludable.
“Estamos ante un crecimiento poblacional de personas +50 que tienen mayor esperanza de vida, y que además se implican de manera activa en la toma de decisiones sobre su salud, su economía y sus vínculos”, advirtió Bernardini.
Destacó que no se puede generalizar y hablar de la tercera edad como una etapa uniforme, ya que cada década trae consigo cambios y desafíos propios.
”No es lo mismo tener 60, 70, 80 o 90 años, la longevidad es un proceso dinámico en el que la experiencia, la salud y la percepción individual juegan un papel clave. La diversidad es la regla. No hay dos viejos iguales”, remarcó.
Doña Jovita, con su humor filoso e inteligente, complementó la visión con anécdotas y canciones que hicieron reír y reflexionar al público.
Bernardini ha dedicado su carrera a transformar la percepción del envejecimiento, a nivel nacional e internacional. Autor de libros como La segunda mitad, impulsa una comunidad de aprendizaje sobre la nueva longevidad, un enfoque que no sólo se centra en la salud física, sino también en la construcción de un propósito y en la transformación social que implica la mayor esperanza de vida en el mundo actual.
Para disfrutar plenamente la segunda mitad de la vida, Bernardini recomienda seis pilares clave: moverse más, cuidar la alimentación, fortalecer amistades profundas, cultivar la espiritualidad, reflexionar sobre el legado y tener un sentido de vida, encontrarun propósito. “Todo esto no se compra, se descubre al comprender lo que sentimos y queremos”, expresó.
“Tengo 82 voy para los 81”, bromeó Jovita y, entre varias desopilantes historias, ofreció una canción con ritmo de hip hop: “Salud y provecho que en su cuerpo sea, que no pierda el juicio ni cultive pena, que Dios lo bendiga, que le llame el vientre (…) ,que tenga sosiego si el trajín le enferma, que controle el esfínter si el amor le merma, que trajine los años de lo más campante, que tanta peripecia no le corte el semblante, que el último día si le dan el pase, lo encuentre completo, y entregue el envase”.

Un nuevo paradigma con potencial transformador
Bernardini destacó que, si bien la sociedad muestra un creciente interés en el nuevo paradigma de la longevidad, se requiere un giro en la prevención para poder disfrutar de la segunda mitad de la vida, así como de nuevas políticas públicas.
Advirtió que en Río Cuarto hay alrededor de 40 mil personas mayores de 65 años, se trata de una parte significativa de la población, con impacto real en elecciones y decisiones sociales. Apuntó que, a nivel nacional, los mayores representan más de 7 millones de votos, pero siguen siendo un electorado poco considerado en los discursos políticos.
Brindó datos duros de gran interés. Habló sobre el “edadismo” y también sobre los estereotipos de género, la habitual consideración de que “el hombre madura y la mujer envejece”.
Indicó que, en Latinoamérica, la vejez promedio puede representarse con “una mujer mayor, sola, pobre y con problemas de salud”. Y mencionó que en Honduras un 60% de la población mayor está desnutrida.
Marcó la necesidad de un enfoque más inclusivo y señaló que en Argentina, los mayores de 70 superan en número a los jóvenes de 16 a 18 años en una proporción de cinco a uno.
Jovita hizo estallar de risa a todo el auditorio con canciones compuestas tras “stalkear” (revisar la información en redes) a Bernardini. “La nueva longevidad son tres palabras que me han dado un empujón de esperanza”, dijo y cerró cantando: “La nueva longevidad es una buena noticia, no es una idea ficticia, un cambio que puede ser realidad, cuando se toma conciencia y se enfrenta la experiencia con el corazón tranquilo, descubriendo un buen estilo de disfrutar la existencia”.
Con respecto a la experiencia de presentarse con José Luis Serrano, Bernardini confió: “Nos conocimos ayer a la noche y hubo una química espectacular. Me sorprendió más allá del personaje. Me encontré con una persona íntegra, profunda, con valores, me encantó y creo que se armó un lindo equipo para sembrar semillas de conciencia”.
“Yo estoy en la nueva longevidad”, proclamó Jovita, decidida a romper viejos esquemas para una vida plena y sin etiquetas.