La crisis económica no sólo está impactando sobre los sectores más vulnerables de la sociedad, sino también en aquellos que antes tenían un empleo “en blanco” y hoy se quedan sin ese sostén. La pérdida de un trabajo formal no sólo implica un menor ingreso: también repercute en la cobertura social de muchas familias.
Según datos del Ministerio de Salud provincial, la proporción de personas que acuden a los hospitales públicos pasó del 35% en diciembre de 2024 al 41% en septiembre de este año. En nueve meses, la demanda en el sistema público provincial aumentó seis puntos porcentuales.
En paralelo, los efectores municipales de la ciudad de Córdoba también registran un fuerte incremento: la Secretaría de Salud informó que en el último año las consultas en los hospitales y centros de salud aumentaron un 37%.
El cálculo se realizó sobre la base de los tres primeros trimestres del año. En 2024, se computaron 635.624 consultas, mientras que este año se registraron 875.198. Para el cotejo de los números se excluyó la demanda que generó la epidemia de dengue el año pasado.
Si bien el crecimiento se dio en forma similar en todos los efectores de salud, los centros de atención primaria registraron mayores incrementos en la demanda de atención: un 40% interanual.
A qué lo atribuyen
Para el economista Rubén Torres, la crisis económica está afectando a las personas más vulnerables y también a la población de ingresos medios. Uno de los indicadores es que los pacientes están dejando de comprar la medicación que necesitan porque no tienen dinero para afrontar los tratamientos, salvo que éstos se provean en forma gratuita.
El aumento en la demanda en el sector público se debe a varios motivos, sintetizó el especialista. Por un lado, al incremento en los índices de desempleo y del trabajo informal. Por otra parte, las obras sociales –sobre todo las más pequeñas– no están dando respuesta a la cobertura demandada por sus afiliados.
Finalmente, al liberarse el precio de las prepagas, el aumento en las cuotas hizo que muchos afiliados cortaran sus coberturas, se volcaran hacia obras sociales más chicas o directamente al sistema público de salud.
“El Gobierno nacional apostó a anular intermediarios en el sistema de las prepagas, con el objetivo de que éstas pudieran reducir las cuotas. Pero esto nunca sucedió. Lejos de disminuir, siguen subiendo”, agregó Torres.

Torres, quien preside la Federación Latinoamericana de Hospitales y fue superintendente de Servicios de Salud, opinó que las dos medidas tendientes a reducir el valor de las cuotas de las prepagas no están dando los resultados esperados: por un lado, la anulación de los intermediarios; por otro, la posibilidad de que las prepagas puedan captar aportes y contribuciones.
“Desde el punto de vista de los resultados, estas medidas no han resultado beneficiosas para los ciudadanos. Cabría esperar que las prepagas rebajen las cuotas y que mejoren la calidad de atención. Por ahora, eso no está sucediendo. Hoy existen demoras de por lo menos dos meses para un turno con un especialista, tanto en la salud pública como privada”, agregó Torres.
Qué sucede en la ciudad de Córdoba
El secretario de Salud municipal, Ariel Aleksandroff, explicó a La Voz que el aumento en la demanda en los centros de salud se debe a múltiples causas, y enumeró cuatro.
En primer lugar, cada vez más personas dejan de pagar sus obras sociales o prepagas, porque ya no les alcanza el dinero. Por otra parte, los afiliados –que siguen quedando en el sistema– deben afrontar aumentos cada vez mayores en el valor de los coseguros, sobre todo, en análisis de laboratorio, ecografías o estudios complementarios.
En tercer lugar, muchas obras sociales y prepagas están retirando medicamentos de sus vademécums o del Programa Médico Obligatorio (PMO). Esto hace que los remedios se tornen de “venta libre” y entonces el afiliado pierda los descuentos parciales o totales de acuerdo con sus coberturas. Este hecho también aumenta el costo de bolsillo de los pacientes.
Finalmente, el funcionario destacó un problema creciente: la pérdida de empleo. Esto hace que más personas acudan al sistema público.
Los servicios más demandados
Según los registros de la Municipalidad de Córdoba, el aumento en la demanda en la atención de salud se da en forma similar “en todos los grupos etarios”.
El incremento se refleja en las consultas, pero sobre todo en las solicitudes de estudios complementarios, como ecografías o análisis de laboratorio. Estas últimas aumentaron un 63% en un año, debido en buena parte al incremento en los coseguros dispuestos por las obras sociales.
La mayor demanda se da en la implementación de programas específicos, como el Gestando Salud, por citar un ejemplo.
Además, los pedidos de medicación gratuita aumentaron un 7%, según el registro de recetas electrónicas de la Secretaría de Salud. Aleksandroff advirtió que la Nación está discontinuando la provisión de medicamentos del programa Remediar, así como la entrega de test de diagnóstico para infecciones de transmisión sexual y preservativos.
“Los municipios y las provincias debemos afrontar con fondos propios la compra de insumos que antes llegaban desde la Nación. Hoy todos esos aportes se ven reducidos y discontinuados”, aseguró el funcionario municipal.
El secretario de Salud de la ciudad de Córdoba indicó que, en este contexto, se está readecuando el sistema para dar respuesta al crecimiento en la demanda de atención.
Y que al mismo tiempo se busca fortalecer la producción de medicamentos en la Farmacia Municipal, sobre todo para dar respuesta a pacientes con patologías crónicas prevalentes, como diabetes e hipertensión.
Finalmente, Torres señaló que el sector de la salud necesita la intervención del Estado. “Una desregulación masiva no sería en este momento la mejor idea si se intenta beneficiar a la población”, cerró.