- El impacto económico y social del coronavirus dificulta el acceso a una alimentación segura y saludable
- advierte la presidenta del Colegio de Nutricionistas de Córdoba.
- En la provincia
- hay unos 2.500 matriculados en la especialidad. Las mujeres representan el 97% de los colegiados.
Eva Pozzi no anda con vueltas. Dice que “la situación de la pandemia acentuó la crisis económica, observándose cambios en la alimentación y en los hábitos de los hogares argentinos que ya se venían manifestando con consecuencias importantes para la salud de la población”, previo a que el coronavirus pusiera el mundo patas arriba.
A su entender, la contingencia sanitaria hizo visible ante los ojos propios y ajenos el grave problema de la inseguridad alimentaria, “dada principalmente por la dificultad para el acceso a una alimentación segura y saludable”, lo que resulta en el empeoramiento de la situación alimentario-nutricional preexistente.
"Los nuevos determinantes sociales, de salud y económicos que conforman la realidad siguen siendo un gran desafío para el colectivo profesional", asume y propone la titular del Colegio de Nutricionistas de la Provincia de Córdoba.
“En este contexto sanitario, epidemiológico y nutricional complejo, el rol social de los nutricionistas cobra mayor relevancia en cada uno de los espacios de desempeño profesional”, considera.
No obstante, ese acompañamiento a la sociedad para facilitarle información y para elaborar propuestas superadoras e innovadoras que contribuyan en la toma de decisiones con el propósito de mejorar la situación nutricional –fundamentalmente de los grupos más vulnerables– no se ve correspondido aún en términos económicos y de reconocimiento profesional.
Los números no mienten
En la provincia de Córdoba, hay unos 2.500 nutricionistas matriculados activos, según el registro del Colegio que los nuclea.
Las mujeres representan el 97 por ciento de ese universo.
Las y los nutricionistas integran el pelotón del fondo en la carrera por los ingresos económicos de quienes ejercen la profesión de manera independiente.
Así lo demostró un estudio de la Federación de Profesionales Universitarios de Córdoba (Fepuc) que consultó a 6.600 graduados autónomos.
El trabajo sacó a cubierta varias verdades dolorosas. Una de ellas: la mitad de las trabajadoras de la salud dedican más de ocho horas diarias al trabajo y ganan 44.500 pesos por mes, un 41 por ciento menos que los hombres.
Las médicas están por encima de esa vara salarial (aunque no tanto), mientras que las nutricionistas la tiran hacia abajo (bastante).
Los números corresponden a mayo último.
Un poco mejor, pero no tanto
Pozzi asegura que, en términos generales, quienes trabajan en relación de dependencia “están un poco mejor que quienes lo hacen en forma liberal”. Atribuye la ventaja relativa al hecho de que están comprendidos en convenios colectivos de trabajo y, por lo tanto, actualizan salarios mediante negociaciones paritarias.
No obstante –aclaró–, en esa condición se desempeña solo el 26 por ciento de los nutricionistas cordobeses, mientras el 65 por ciento lo hace como monotributista o autónomo. Y el resto, es becario o ejerce bajo otra modalidad laboral.
Dicho de manera más llana: el 74 por ciento de los especialistas en nutrición no gozan de todos los beneficios ni de la estabilidad laboral de un asalariado.
Otro dato que caracteriza al sector: la mayoría de los profesionales tienen pluriempleo, y un tercio de ellos prestan servicios simultáneamente en el ámbito público, el privado y en organizaciones de la sociedad civil.
“El futuro nos demanda una mirada cada vez más crítica de la problemática y determina un rol importante como agentes de los cambios necesarios para mejorar la situación alimentaria y nutricional de la población”, avizora Pozzi.
“Estamos en ese camino y asumimos el desafío con absoluta responsabilidad y compromiso”, concluye la dirigente profesional.
¿Por qué hoy? El 11 de agosto se celebra el Día del Nutricionista. La fecha recuerda el nacimiento, en 1938, del profesor Pedro Escudero, creador de la especialidad, fundador y director del Instituto Nacional de Nutrición.
Alumbramiento en Córdoba. El 14 de abril de 1988 se promulgó la ley N° 7.661. La norma legal creó el Colegio de Nutricionistas de la Provincia de Córdoba.
