Luego de dos peritajes, la Justicia federal determinó que la contaminación producida por la Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar) de Bajo Grande no afecta a la laguna Mar Chiquita. Aunque sí advirtió sobre un alto índice de bacterias en el río Suquía a partir del vertido de líquido cloacal sin tratamiento.
Tras estos resultados, el Juzgado Federal 3 se declaró incompetente para intervenir en la causa, ya que el vertido de efluentes de la planta no produce un conflicto de ambiental interjurisdiccional con Santiago del Estero sino que solamente afecta a la provincia de Córdoba. Es la segunda vez que este tribunal señala que no corresponde al ámbito federal investigar la denuncia.
La resolución firmada por el juez federal Miguel Hugo Vaca Narvaja pide remitir el expediente a los tribunales provinciales y una copia a la Secretaría de Ambiente de la Provincia de Córdoba. Los peritajes determinaron altos niveles de contaminación producidos por la planta en el río Suquía y en menor medida en su desembocadura: la Laguna de Plata.
En este escenario, la Justicia provincial tendrá que decidir si procede o no a la acción penal que pesa sobre el exintendente Ramón Mestre desde marzo del 2020 y otros ocho funcionarios vinculados a la planta tras la denuncia realizada en abril de 2017 por el exconcejal de ADN, Santiago Gómez, ahora director del CPC San Vicente.
Luego se sumaron a la demanda los vecinos de Chacra de la Merced y el Foro Ambiental Córdoba, que anticipó a este medio que apelará la resolución.
Otro antecedente se remonta a 2018, cuando la jefa comunal de Capilla de los Remedios, Miriam Gómez, presentó una denuncia ante los tribunales provinciales por contaminación.
Daño ambiental
A pesar de no haber detectado contaminación en la laguna Mar Chiquita, la resolución da cuenta del problema ambiental del Suquía inclusive antes de su paso por la planta de Bajo Grande.
“El fósforo total experimentó un incremento a 0,52 miligramos por litro (mg/l) a la altura del vertido de la planta de líquidos cloacales, y aguas debajo de esta, el valor obtenido fue de 0,93 mg/l. Este incremento en el valor del fósforo total, con relación al punto de muestreo previo al volcamiento de la planta de Bajo Grande y que se sostiene aguas debajo de la misma, puede ser atribuido a los líquidos vertidos por la planta en cuestión”, señala el fallo.
El tribunal tomó la última muestra de agua el 5 de julio de este año, ya durante la gestión del intendente Martín Llaryora. La normativa provincial establece un máximo de 0,5 miligramos de fósforo por litro de agua.
El fallo agrega: “el río Suquía tiene niveles cuantificables de indicadores microbiológicos de contaminación fecal antes de pasar por el sitio de vertido de la planta Bajo Grande, estos parámetros experimentan un marcado incremento en el punto de recepción de los vertidos provenientes de la planta y se mantienen muy elevados, en relación al número de base, aguas abajo del sitio de vertido de la planta”.
“Los recuentos obtenidos en el río de estos parámetros microbiológicos -coliformes totales- a la altura del vertido de la planta de Bajo Grande, indican que estos máximos indicados por la provincia claramente no se cumplen”, agrega la resolución.
En relación a la presencia de fósforo en Mar Chiquita el estudio señala que “en la desembocadura del río Suquía, los resultados obtenidos evidenciaron la dilución del fósforo total”.
Incompetencia
“Se observa, que en el último punto donde se ha realizado la toma de muestra para análisis, no se evidencia en absoluto la presencia de coliformes fecales, Escherichia coli, coliformes totales ni de estreptococos fecales, y que el fósforo total es evidenciado en una proporción de 0.18 mg/l, por lo que no supera el máximo permitido”, señala el texto judicial tomando como base el último estudio realizado por el Centro de Química Aplicada (Cequimap) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
“En base a dos peritajes realizados es posible afirmar que dichos elementos no se encuentran presentes en la laguna Mar Chiquita, que colinda con la provincia de Santiago del Estero, por ende, se encuentra acreditado en autos que no existe interjurisdiccionalidad en la afectación al medio ambiente, por lo que la competencia federal debe rechazarse”, expresa el fallo.
