El vaso con agua y sal gruesa se convirtió en un recurso muy utilizado en las casas ya que es considerado efectivo para absorber energías negativas y purificar los ambientes, además de que es fácil de realizar y tiene múltiples beneficios.
Según diversas creencias y prácticas, este sencillo ritual puede servir para absorber las malas energías, ya que, según se dice, ayuda a neutralizar la negatividad.
También es considerado ideal para renovar la energía después de momentos de tensión, como un purificador de ambientes. A su vez, muchas personas lo utilizan para equilibrar el estado de ánimo y así atraer armonía.
Más allá de las energías, puede ser un gran aliado para eliminar la humedad y los malos olores, ya que los componentes de la sal ayudan purificando los espacios cerrados.
Cómo realizar el ritual para atraer la abundancia
Para invocar la buena suerte y la abundancia en el hogar, hay que seguir estos pasos:
- Poner 3 cucharadas de sal gruesa en un vaso con agua.
- Dejar reposar la mezcla durante 10 minutos.
- Después de ese tiempo, lavar las manos con la mezcla.
- Mientras, hay que repetir en voz alta: “La sal es mi protectora y ella me ayudará a que mi dinero se multiplique y nunca falte en mi hogar ni en mi negocio. Hecho está. Gracias, gracias, gracias”.
- Por último, aplaudir tres veces y dejar que las manos se sequen solas.
El poder de la sal y el Feng Shui
La sal posee un enorme poder vinculado a cuestiones energéticas, lo que puede traer grandes beneficios para el hogar. Según los lineamientos del Feng Shui, lavarse las manos con sal produce una profunda limpieza energética, renovando las energías e invocando bienestar.
Además, las manos son grandes conductoras de energía al tener contacto con otras personas y espacios. Lavarse las manos con sal purifica y elimina bloqueos que puedan estar afectando el equilibrio energético y el flujo del dinero.
Para un efecto continuo, se recomienda cambiar el agua cada siete días. Más allá de las creencias, este truco fácil y sin costo puede ayudarte a mejorar el espacio y atraer la abundancia.
Es importante recordar que este ritual es un complemento y no un sustituto de acciones concretas para mejorar la situación económica y personal.