El sarro en el hogar no sólo es molesto porque recubre azulejos, paredes de duchas y griferías con un velo gris blanquecino, sino que también puede arruinar los electrodomésticos.
Esta cal u óxido de calcio se deposita con especial rapidez en las superficies expuestas al agua caliente. Cuanto más dura sea el agua, mayor cantidad de sarro contiene. Y cuanto más caliente esté, más rápido es el proceso de calcificación.
Esto se convierte en un problema en algunos electrodomésticos que funcionan con agua.
Por qué limpiar el sarro de los electrodomésticos ahorra dinero y electricidad
La máquina de café, por caso. El sarro se acumula poco a poco en las tuberías y las obstruye. Una consecuencia es que la máquina tiene que calentarse más para alcanzar la temperatura necesaria para hacer café. Por lo tanto, el consumo de energía aumenta.
Entonces, ¿cada cuánto tiempo hay que limpiar el sarro de los electrodomésticos?
La frecuencia depende de la intensidad con que utilicemos el aparato y de la dureza del agua del lugar. Algunos aparatos modernos nos recuerdan, por ejemplo con señales en la pantalla o luces de advertencia, que debemos descalcificar. En otros puede notarse o incluso oírse cuando la capa de sarro se hace más gruesa.
Nuevamente resulta útil el ejemplo de la máquina de café. Si el chorro de café de una cafetera automática sale de forma irregular y más despacio de lo habitual, el responsable puede ser el sarro. O, también, si el aparato hace más ruido que antes.
El consejo de los expertos es no esperar tanto y llevar a cabo una descalcificación periódica. De lo contrario, la capa de sarro se hará tan gruesa con el tiempo que será muy difícil de remover. Cuanto más grueso sea el sarro, más tiempo tendrá que actuar el descalcificador.
Con qué producto se limpia mejor el sarro
Cualquier ácido funciona contra el sarro, pero no todos los agentes resultan adecuados para los electrodomésticos delicados. Algunos fabricantes desaconsejan el uso de vinagre, por ejemplo, porque su ácido puede atacar y dañar las piezas de goma y plástico del aparato.
El consejo de los especialistas es leer las instrucciones de uso y respetar la dosificación de los agentes recomendada por el fabricante. Esto es especialmente apropiado para los aparatos de calidad, porque estos agentes se adaptan a estos aparatos.
También es bueno saber si los métodos caseros son adecuados. El ácido cítrico tiene un punto de ebullición más alto que el vinagre y es adecuado para descalcificar con agua caliente.
En cuanto al vinagre es mejor utilizarlo bien diluido, porque es más agresivo que el ácido cítrico. Puede dañar las piezas metálicas y si se lo mezcla con agua caliente, también huele muy intenso y acre.
Sea cual sea el producto que se utilice para la descalcificación, posteriormente la máquina siempre debe ser bien lavada para que no queden residuos de los agentes empleados. De lo contrario, el café, el té o el agua para el mate tendrán un sabor ligeramente ácido.
Qué pasa con el lavarropas y el lavavajillas
Una buena noticia es que no es necesario descalcificar el lavarropas ni el lavavajillas. En las lavadoras son los propios detergentes los que hacen el trabajo.
Casi todos los detergentes contienen descalcificadores, así que la eliminación del sarro es un proceso permanente con cada lavado.
Por esta razón, también debe seguir las recomendaciones de dosificación de los fabricantes de detergentes que están detalladas en el envase. La cantidad de detergente necesaria depende de la dureza del agua de la zona, la cantidad de prendas y el grado de suciedad de la ropa.
La dureza del agua del lugar puede investigarse a través de internet o bien consultando al proveedor local. El agua más dura requiere más detergente, ya que este la ablanda un poco.
Si, además, se emplea adicionalmente un descalcificador, la cantidad de detergente -al igual que con agua blanda- debe ser menor.
Los lavavajillas disponen de un sistema de ablandamiento integrado, que regula la dureza del agua local antes de la puesta en marcha. Una sal especial, que debe reponerse periódicamente, ablanda el agua demasiado dura.
Y quienes utilicen en el lavaplatos las pastillas “todo en uno” con función de descalcificación incluida, no suelen necesitar sal regeneradora adicional.
