En la despedida de Carolina Scotto como rectora, Franja Morada protagonizó las primeras escaramuzas en el nuevo campo de batalla que será el Consejo Superior con Francisco Tamarit como nueva cabeza de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
Fue en la última sesión del órgano de gobierno universitario, el martes último, cuando los radicales universitarios se despacharon con un proyecto de declaración cuestionando la reforma judicial impulsada por el Gobierno nacional.
Más allá de una preocupación legítima sobre este asunto, la cuestión es que Franja Morada avisó cómo serán las cosas a partir de ahora, tras la derrota en la última elección de rector a manos del scottismo.
Referentes del radicalismo-UNC reconocieron que
la "política nacional" será uno de los motivos que los diferenciará en esta etapa de sus exsocios de Cambio Universitario.
"Es evidente que desde ahora vamos a estar en otra vereda, pero no vamos a ejercer una oposición destructiva, ni vamos a poner en riesgo los avances de la gestión", señaló una fuente de Franja Morada en el Consejo Superior.
Las diferencias observadas durante la campaña electoral pasada, que terminaron rompiendo una alianza de seis años, se verán reflejadas en el Consejo Superior.
En estos tres años de gestión de Tamarit, Franja Morada pretende volver a convertirse en una alternativa política y apostará alguna de sus fichas a propiciar una mayor transparencia en la distribución presupuestaria.
Calma
En el entorno de Tamarit confían en que Franja Morada ejercerá una "oposición razonable".
La renuncia de Jhon Boretto al cargo de secretario general del Rectorado se concretó el martes pasado –como se esperaba–, y fue despedido con grandes elogios por parte de Scotto y Tamarit.
Fue un homenaje sincero de los máximos referentes de Cambio Universitario hacia un referente histórico del radicalismo en la UNC como Boretto, quien sostuvo la candidatura a rector de Alfredo Blanco. Y también fue un guiño para la futura convivencia política.
En cuanto al gabinete que Tamarit conformará para su gestión, –tal como adelantó este diario– cobraron fuerza los nombres de Alberto León, como secretario general, y de Sergio Obeide, como secretario de Planificación y Gestión Institucional. Éste último, sobreviviente de la gestión de Scotto.
Del resto, sólo se sabe que Tamarit esperará hasta después del 19 de junio, tras los festejos de los 400 años.
Lo que trascendió es que el flamante rector tiene en carpetas nombres que causarán "sorpresa".
Primeras escaramuzas en el nuevo campo de batalla
Franja Morada será ahora la fuerza opositora más visible que tendrá el rector Francisco Tamarit en el Consejo Superior. Pero los radicales reconocieron que no serán adversarios destructivos. Juan Carlos Carranza.
25 de abril de 2013,
