La Kombucha es una bebida milenaria muy consumida en China, en tiempos de la dinastía Tsin, pero hace unos años adquirió fama mundial. Está elaborada según una antigua receta de té, azúcar y cultivos de Kombucha. Concretamente es té (verde o negro) infusionado y azucarado que se pone a fermentar con una colonia de levaduras y bacterias, que hoy se conoce como scoby (Symbiotic Colony Of Bacteria and Yeast), es decir el hongo.
Este alimento no figuraba en el Código Alimentario Argentino, lo que impedía tramitar los códigos obligatorios para comercializar en el Registro Nacional de Productos Alimenticios (RNPA) y en el Registro Nacional de Establecimientos (RNE).
Sin embargo, el Ministerio de Salud de la Nación acaba de publicar en el Boletín Oficial una resolución que establece que la kombucha ingresó al Código Alimentario Argentino. Esto significa que la bebida milenaria fue aprobada para el consumo en Argentina.
Alejandra Manca, bromatóloga, técnica superior en alimentos y cofundadora de Vitea Kombucha, gestionó la incorporación de la kombucha en el Código Alimentario Argentino (CAA), y ahora celebra la resolución de la máxima autoridad sanitaria del país.
En 2016, Manca introdujo su propia marca en Córdoba y aprovechando la producción nacional de té y azúcar, la más grande del continente americano, creó sus primeros elixires de kombucha en sabor original y té negro.
Qué es la kombucha
Consultada por La Voz, Manca explica que se trata de una bebida gasificada elaborada a base de té. “Es una bebida viva que se elabora fermentando una infusión de té azucarado mediante una combinación de bacterias acéticas y levaduras normalmente llamado SCOBY (por sus siglas en inglés, Symbiotic Culture of Bacteria and Yeast)”, detalla.
Es naturalmente energizante y antioxidante gracias a los polifenoles contenidos en el té. Además, aporta bacterias y levaduras benéficas para la salud de la microbiota, ayudando a fortalecer el sistema inmune y optimizar el sistema digestivo.
Contiene enzimas, ácidos orgánicos, vitaminas del grupo B y es levemente gasificada gracias a su proceso de fermentación natural.
La especialista remara que la kombucha es considera un super alimento, 100% natural que contiene una mayor densidad de nutrientes en pequeñas cantidades.
Sobre por qué se volvió una tendencia, Manca opina que si bien es un alimento y una bebida ancestral milenaria, hoy por hoy ya se conoce los beneficios y la gente lo adopta como la opción natural y saludable para acompañar la rutina diaria.
“Por ejemplo, todo aquel que no quiere tomar alcohol y quiere mantener una vida saludable opta por tomar kombucha en lugar de gaseosas dietéticas”, cuenta.
“La mentalidad de la gente está cambiando: se dan cuenta que una gaseosa por más que sea dietética tiene edulcorantes y otros compuestos que a la larga siguen siendo nocivos para la salud mientras que la kombucha es 100% natural. Y al ser un alimento fermentado cubre varias cuestiones nutricionales además de ser rica y poder disfrutarla en cualquier momento del día”, agrega la bromatóloga.
¿Cualquiera puede tomar kombucha?
Manca detalla que la gran mayoría de las personas puede tomar kombucha, ya que es un alimento fermentado y no representa riesgo alguno. Sin embargo, advierte que su consumo puede ser excluido por prescripción médica o alguna patología en particular.
¿Cómo se toma?
La técnica en alimentos recomienda comenzar tomando medio vaso por día durante la primera semana, luego, si no hay efecto adverso alguno, subir la cantidad hasta llegar a un vaso por día.
Se toma fría. Puede ser en ayunas, para optimizar su efecto probiótico. Como energizante a media mañana.
También es ideal para acompañar las comidas y para reponer energía posentrenamiento.
“Por supuesto que se puede tomar más también, pero por la condición ácida propia del producto, se recomienda no superar el litro por día. De esta manera evitamos algún tipo de acidosis provocada por la misma”, aclara la especialista.
Los beneficios para la salud de la kombucha
- Desintoxicación. Promueve la salud hepática. Es rica en muchas de las enzimas y ácidos bacterianos que produce el cuerpo y que utiliza para desintoxicar el sistema, reduciendo así la carga pancreática y hepática.
- Digestión. Es una bebida probiótica, fermentada de forma natural mediante una colonia de bacterias y levaduras. Mejora la digestión y sobrecrecimiento de cándida, aporta claridad mental y refuerza estado de ánimo.
- Articulaciones. La kombucha contiene glucosaminas, que ayudan a prevenir y a tratar todo tipo de artritis. Las glucosaminas aumentan la producción de ácido hialurónico sinovial, el cual contribuye a la conservación de la estructura del cartílago y previene los dolores artríticos.
- Sistema inmune. Por su gran cantidad de antioxidantes ayuda a estimular la respuesta inmunológica y los niveles de energía.