La piel recibe agresiones externas durante todo el año. Sin embargo, la mayoría de las personas suelen ser más cuidadosos con este órgano durante el verano porque la exposición al sol se hace más evidente. En invierno suelen presentarse factores ambientales que pueden ocasionar reacciones que desestabilicen la piel y generen trastornos que se perciben y manifiestan a simple vista. Los especialistas advierten que la piel atópica es una condición que se debe cuidar siempre.
En los meses más fríos del año, algunas personas presentan ciertas manifestaciones cutáneas como rosácea, dermatitis e incluso acné. Diversos estudios demuestran que, en general, las personas que sufren algún tipo de enfermedad en la piel -y que resulta visible- se sientan incómodas en su vida social o que tiendan a evitar interactuar con otros.
Silvina Quintana Lazópulos, doctora en Química y coordinadora técnica del laboratorio de químicos para el cuidado personal del fabricante BASF, explicó que la piel con tendencia atópica es un trastorno que provoca enrojecimiento de la piel, sequedad y picazón. Si bien es frecuente en niños, actualmente y debido al estrés, la polución y los malos hábitos de cuidado de la piel puede manifestarse también en la edad adulta y transformarse en una condición crónica.
Cuáles son las causas de la piel atópica
Su origen es multifactorial y está asociado a factores genéticos, inmunológicos y ambientales, favoreciendo la perturbación y defecto de la barrera cutánea. Esto deriva que la piel pierda agua transepidérmica en forma superficial y se deshidrate. La piel seca puede ser una condición permanente y la deshidratación un fenómeno reversible mientras que se pueda regular el contenido de agua.
Al tratarse de un trastorno que afecta el aspecto y la percepción de la piel, esto puede significar una incomodidad en quienes lo padecen. Por eso Quintana Lazópulos advirtió que la dermocosmética trabaja en el desarrollo de ingredientes que puedan formar parte de productos cosméticos utilizados por personas que tienen este tipo de condición cutánea, con el fin de mejorar los signos y síntomas de la piel atópica, y constituir un tratamiento coadyuvante dermatológico ante la detección de alguna señal, como eccema, enrojecimiento, entre otras.
Cómo se trata la piel atópica
Los especialistas en la materia advierten que es fundamental estar atentos a los síntomas y consultar con aquellos profesionales entrenados en esta enfermedad, ya que, cuanto antes se diagnostique, el médico dermatólogo podrá indicar el tratamiento y seguimiento adecuado para cada caso.