¿Todos los medicamentos caducados suponen un riesgo para la salud? ¿O depende del tipo de fármaco? Qué puede pasar si tomo un medicamento caducado hace unos días, semanas o meses? ¿Pierde eficacia? ¿Puede llegar a ser tóxico?
Pablo Caballero, farmacéutico del área de divulgación científica, subraya que, como regla general, se recomienda no administrar ningún medicamento que haya caducado.
En la mayor parte de los casos, un medicamento que superó unos pocos días su fecha de caducidad no provocará problemas de seguridad asociados a un aumento de la toxicidad, pero la propia pérdida de eficacia del medicamento puede tener importantes consecuencias en el control de la enfermedad o de la condición a tratar: especialmente cuando pasó bastante tiempo desde la fecha de caducidad.
Cuidado con los colirios
No en todos los casos se puede asegurar que los medicamentos sean seguros. Por ejemplo, los colirios suelen ser “especialmente susceptibles a la contaminación microbiana”, y al emplearlos es importante atender al periodo de validez pues, aunque la fecha de caducidad puede ser prolongada, una vez abiertos pueden alterarse fácilmente.
“En cualquier caso, siempre conviene atenerse a lo indicado en el prospecto, o consultar con el farmacéutico, pues existe una gran variedad de productos comercializados. Mientras que algunos pueden contar con un periodo de validez de horas o días, en otros casos puede ser de varias semanas”, sostiene el experto.
Otro ejemplo de medicamentos que pueden suponer un riesgo para la salud al administrarlos una vez que han superado la fecha de caducidad son algunos antibióticos, tal y como asevera este experto, y concretamente los que contienen tetraciclinas, pues “la degradación de estos fármacos genera productos tóxicos que pueden tener efectos nocivos para la salud, sobre todo para los riñones”.
Fecha de caducidad vs. periodo de validez
Pero, ¿qué significa realmente que un medicamento está caducado? El especialista explica que la fecha de caducidad de los medicamentos se establece en base a estudios de estabilidad, que garantizan que si se conservó el medicamento respetando las condiciones que se establecen en el prospecto, éste mantiene sus características de eficacia, de seguridad, y de calidad.
“Por lo tanto, una vez que se ha superado esa fecha de caducidad no es posible garantizar que el medicamento sea eficaz, ni que mantenga su perfil de seguridad o su calidad”, insiste Caballero.
También es importante diferenciar entre ‘fecha de caducidad’, y el ‘periodo de validez’. Sostiene que el ‘periodo de validez’ se aplica a determinados medicamentos, principalmente a los multidosis, como los colirios, o los jarabes, por ejemplo; se trata de presentaciones en envases que debemos abrir más de una vez durante la utilización del medicamento, incrementando la probabilidad de alteración por factores como contaminación microbiana, exposición al aire o a humedad, entre otros.
En estos casos, el medicamento puede tener una fecha de caducidad que aplica hasta el momento en que se abre el envase. Sin embargo, una vez que abrimos el envase aplica el periodo de validez, que indica el plazo de tiempo que podemos continuar administrando el medicamento tras el primer uso. Estos envases contienen un espacio donde se puede apuntar la fecha de apertura”, apunta el experto farmacéutico.
La fecha de caducidad se determina mediante estudios de estabilidad que permiten calcular, de acuerdo a las propiedades fisicoquímicas del medicamento, durante cuánto tiempo mantiene sus características inalteradas o dentro de un rango de aceptabilidad. “Estos estudios permiten tanto establecer una fecha de caducidad como los requisitos de conservación, pues algunos principios activos son muy sensibles a la humedad, a las temperaturas elevadas, o a la exposición solar. En estos casos, el cumplimiento de estas condiciones de conservación es también fundamental para garantizar que el medicamento no se altere”, agrega.
Almacenamiento y desecho correcto de los remedios
Los medicamentos deben guardarse en lugares frescos, secos y alejados de la luz solar directa.
Además, es crucial mantenerlos en su envase original junto con el prospecto, respetando las condiciones específicas de conservación indicadas, como la temperatura adecuada, que puede variar entre 2°C y 8°C, menos de 25°C o menos de 30°C, dependiendo del tipo de medicamento.
Lugares como la cocina, el baño o el interior del auto no son adecuados, ya que están expuestos a cambios de temperatura y humedad que pueden alterar la calidad del producto.
En cuanto a los medicamentos caducados, es importante no desecharlos en la basura, ya que pueden ser contaminantes para el medioambiente. La recomendación es llevarlos a los puntos de recolección, donde se encargan de su reciclaje y eliminación adecuada.