“Estamos muy contentos en El Taller, porque llegaron las cajas-macetas, un diseño en el que hemos trabajado mucho, pensando en las ´tres erres´: reducir, reciclar y reutilizar”.
El reconocido cocinero cordobés –tal como se define en su perfil de Instagram– Juan Cruz Galetto (38) cuenta la novedad en la misma red social de su pizzería ubicada en Villa General Belgrano, en el Valle de Calamuchita.
Desde hacía un tiempo, se habían propuesto reducir la pila enorme de cajas que se convertían en basura cada vez que entregaban una pizza para llevar. Lo mismo que ocurre con las entregas de miles de locales de comida a domicilio.
El primer paso fue lanzar un concurso de ideas entre clientes y vecinos. La cosa nació participativa. Y de allí surgieron propuestas que decantaron en las cajas-macetas.
“Le dimos una vueltita, para que sea lo más práctico posible”, señala Galetto a La Voz. Las macetas son biodegradables y compostables.
En cada una de las dos caras de cada caja de cartón hay una figura troquelada, que se desprende fácilmente al presionar. Al retirarla, permite armar, sin pegamento y con facilidad, una maceta firme pero de material biodegradable.
Luego, queda colocar tierra con algún plantín o semilla en su interior, y plantarla. Salen dos macetitas, de material biodegradable, por cada caja de pizza.
Juan Cruz revela que decidieron no patentar la idea, pese a que no encontraron iniciativas similares.
“Como era una idea novedosa y vimos que en el mundo no existe, pensamos en patentarla, pero después decidimos no hacerlo. En realidad, queríamos lo contrario: hay que compartirlo y está abierto a que todas las pizzerías lo incorporen”, detalla.
“La idea no es sacar provecho de esto, sino ayudar al medio ambiente, que es de todos”, subraya el cocinero cordobés.
Un chef reconocido
El joven, oriundo de Río Cuarto, se involucró con la gastronomía casi de casualidad, cuando en la ciudad de Córdoba comenzó a trabajar como lavacopas para financiar sus estudios de la carrera de Psicología en la universidad.
Al poco tiempo, había dejado la bacha y el detergente para convertirse en el cocinero del lugar. También dejó la carrera para estudiar gastronomía, que descubrió como su nueva pasión. Así comenzó y nunca más salió de la cocina.
Junto con su compañera Yanina Debiaggi (37), también cocinera, tuvieron un restaurante durante casi una década en una estancia de Villa Berna, cerca de Villa General Belgrano. Allí cultivó la fama de ser uno de los mejores de Córdoba.
Hace algo más de dos años se instalaron en Villa General Belgrano, con un restaurante que se destaca por la pizza estilo napolitana que elaboran.
Eligieron Calamuchita para vivir, y desarrollar el emprendimiento comercial y el proyecto familiar.
Otro granito: menos plástico
En el camino por las “tres erres” que comenzó a desandar El Taller, en pocos días instalarán además un equipo que les permitirá mineralizar el agua y gasificarla, para erradicar el uso de envases de plásticos en estos productos.
A la mesa de los comensales, el agua mineral y la soda llegarán en este local en envases reutilizables.
