Con una nota enviada al Consejo Superior de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), un grupo de padres del colegio preuniversitario Manuel Belgrano de la ciudad Capital exigen mayor presencialidad de clases y elaboraron un informe sobre cómo se lleva adelante -de forma “deficitaria”, según ellos- el ciclo lectivo 2021, en medio de la segunda ola de coronavirus.
El informe busca que el Consejo Superior trate este martes la solicitud para que se “reformule” la propuesta de dictado de clases, respetando los protocolos vigentes y los nuevos conocimientos en relación a los cuidados que implica el Covid-19.
En ese sentido le piden la mayor celeridad posible al organismo universitario para que se trate el caso.
Cabe recordar que en marzo de este año, un grupo de docentes no creía conveniente retomar clases presenciales. En igual sentido habían recibido el apoyo del Consejo de Padres. Pero desde otro sector, denominado Padres Organizados, habían realizado sendas protestas -tanto en el Belgrano como en el Colegio Nacional de Monserrat- para exigir la reapertura de las aulas.
Por otro lado, por casos positivos de coronavirus, profesores pidieron suspender la presencialidad el paso 28 de abril.
El reclamo actual
“Desde la finalización del ciclo lectivo 2019 en octubre de ese año, nuestros hijos e hijas tuvieron sólo un día de presencialidad en 2020 ya que esa misma semana se decretó el pase de las clases de los colegios secundarios a la virtualidad, la que se extendió hasta la finalización del año. E inexplicablemente, volvieron recién el 19 de abril de 2021, acumulando más de 17 meses sin clases en el espacio físico de la escuela. Recordemos que los demás colegios de la provincia iniciaron sus actividades en bimodalidad desde marzo de este año”, añade el escrito.
Los padres consideran que la actual modalidad es “deficitaria”.
“Es necesario señalar las numerosas dificultades para adaptarse de muchos profesores y alumnos a esta nueva modalidad, lo que redundó en un pobre desempeño pedagógico y en una experiencia educativa dispar y poco satisfactoria para la gran mayoría de estudiantes”.
“Recordamos que, sin una explicación clara del motivo, no se utiliza el turno tarde, se interpone una semana completa de virtualidad (sin concurrencia a la escuela) entre las semanas presenciales, las cuales son medias jornadas a su vez divididas en 3 burbujas. Los módulos de 80′ se redujeron a 40′. Todo esto trae como resultado una organización extremadamente complicada de los tiempos para los estudiantes, sus familias y también para los profesores”, se agrega en el informe.
También se adjuntan gráficos con la propuesta realizada y los problemas del actual sistema.
Dos burbujas
“Consideramos que resultaría más operativo que la escuela implemente, al igual que lo hicieron otros colegios de la provincia de Córdoba, un esquema de sólo 2 burbujas (y no 3 como es ahora) con asistencia de forma alternada”, agrega el informe.
Principales conclusiones del informe
- 1. En la primera semana presencial se dictaron poco más de la mitad de las clases. Ver Gráfico Nº 1. Nota: son sólo 5 las mañanas presenciales previstas de asistencia para cada estudiante en un ciclo de 30 días de clases distribuidas en 6 semanas.
- 2. Más del 60% de los motivos de ausencia de los docentes no fueron explicados a los alumnos ni justificados.
- 3. No se previó que las clases presenciales puedan ser transmitidas online para que las burbujas ausentes o los alumnos que no pueden asistir accedan a la clase.
- 4. Durante la semana virtual sólo se previó la implementación de la mitad de las clases que tienen en período de normalidad, un promedio de 2,5 sobre 5 módulos. Y aún esos módulos previstos no se dictaron en su totalidad.
- 5. Un 43% de las actividades asincrónicas subidas al aula virtual no son informadas debidamente a los estudiantes.
