Sierras, arroyos y espacios culturales se combinan en Alta Gracia. La ciudad, a sólo 35 kilómetros de Córdoba Capital, es de esos sitios especiales para escapadas de un día. Y el principal centro urbano de un valle serrano (el de Paravachasca) con numerosos balnearios y paisajes atractivos.
En medio de la pandemia, Alta Gracia y alrededores ofrecen varias opciones al aire libre donde solo hace falta reposera y mate para descansar. Si se trata de algún consumo, hay variedad para diferentes gustos y bolsillos en gastronomía, cultura y alojamiento,
Si el paseo empieza temprano, un desayuno completo (café con leche con tostadas, medialunas, jamón, queso, manteca y mermelada) para dos personas cuesta 490 pesos en una confitería sobre calle Sarmiento. Con masitas dulces o saladas, un licuado se paga 170 pesos, y un café con leche desde 120, en un conocido hotel en calle Vélez Sársfield.
El turismo histórico y cultural es un punto fuerte de Alta Gracia. Por la mañana, valen las variadas propuestas de museos. En pleno centro, la arquitectura de los jesuitas, declarada Patrimonio de la Humanidad, se puede observar en el Tajamar y sus alrededores y en el Museo de la Estancia.
Muy visitado, durante todo el año, es el Museo del Che, en la casa que supo habitar de niño Ernesto “Che” Guevara. El Museo Arqueológico, el dedicado al músico Manuel de Falla y el de arte de Gabriel Dubois, están entre las opciones en espacios culturales para visitar.
Pinta el almuerzo
Si sobre el mediodía sale una “picadita” se puede conseguir salame, queso más pan casero desde 600 pesos. En distintos comedores, se presenta acompañada de una “pinta” de cerveza.
La pinta sola al paso cuesta 250 pesos en el local de Bonafide, en el centro. Con una hamburguesa, se va a 750 pesos; con rabas, a 900. En Madriguera, una pizza de muzzarella más dos pintas se cobra 990 pesos. Más económico y rápido: dos empanadas salteñas mas una pinta de cerveza, a 390 pesos.
Los menús del día con postre se pagan ahi 850 pesos. Y una hamburguesa más gaseosa chica desde 900.
Las opciones de restaurantes categorizados no faltan: también hay una buena lista para elegir.
Si el calor pide un helado, la heladería artesanal La Merced es la más tradicional de la ciudad, con 75 años en el rubro y recomendada por sus vecinos. Allí, una bocha se paga 180 pesos, dos cuestan 250 pesos y el kilo sale 1.200 pesos.
Al aire libre
El arroyo Chicamtoltina, que atraviesa Alta Gracia, ofrece asadores, sombras y bancos, para los que deseen acercarse, sin costo. Además, cuenta con una bicisenda y un gran espacio para deportistas que corren trayectos largos.
En el parque natural García Lorca, la Municipalidad a través de un código QR muestra posibles recorridos a través de caminatas, sea para los más experimentados o para los que recién comienzan con esta práctica.
Otra opción es el parque del Sierras Hotel, que suele ser elegido por los propios vecinos de la ciudad para caminar y correr en un sitio agradable. Sus sombras también sirven para una mantita con matecito ocasional.
El lago del Tajamar, con su impronta de historia jesuita, es otro clásico para disfrutar al aire libre. Para actividades pagas, los botecitos son llamadores para pasear por el agua: para dos personas salen 500 pesos y para tres, 700 pesos. Si se camina por el “Taja” –como le dicen los lugareños– no hay que perderse de observar los patos y tortugas que suelen nadar por allí. Y eso es gratis.
Artesanos y emprendedores
Si el recorrido sigue, cuando cae la tarde, los puestos de artesanos y emprendedores se pueden encontrar en la Plaza Solares o en el Paseo del Virrey. Dulces artesanales, ropa, diferentes tipos de comidas y de objetos, se pueden encontrar mientras se pasea por ambos sitios.
También hay espectáculos de circo para niños y niñas y otros eventos al aire libre para los turistas de la ciudad, con entradas a la gorra.
Y queda, siempre, si hay tiempo o se prolonga la estadía un día más, una recorrida por las comunas cercanas, sobre el río Anisacate para hacer algunas horas de balneario, playa y agua, en plenas sierras.
* Corresponsalía
