“Esa nena no tendría que haber muerto”, fue la expresión que dejó uno de los peritos en las puertas de Tribunales, donde familiares y allegados de Lucrecia Ñañez siguen las alternativas del juicio que se hace en el quinto piso de los Tribunales de Villa María.
Cinco médicas y médicos del hospital provincial Pasteur están siendo juzgados por el supuesto delito de homicidio culposo de esta adolescente de 15 años, quien en junio de 2017 falleció luego de sufrir complicaciones en su embarazo de tres meses.
La segunda audiencia devino en fuertes discusiones entre las partes y los peritos oficiales que fueron citados como testigos. El enfrentamiento más fuerte no se produjo con los abogados defensores de los cinco médicos y médicas, sino con el fiscal de Cámara.
Los dos peritos oficiales cuestionan, en sus informes, lo que se hizo (y no se hizo) dentro del hospital público provincial aquellos días de mediados de 2017.
El fiscal Francisco Márquez insistió con que determinaran si lo que habían hecho u omitido cada uno de los imputados podía considerarse causal directa de muerte.
Los testigos aclararon que no podían expresarse en ese sentido en forma particular, pero sí remarcaron que hubo una “concatenación” de acciones que dieron lugar a “un proceso desgraciado” de mala evolución de la paciente, hasta que falleció.
El caso
Lucrecia había sido llevada una madrugada al centro de salud con fuertes dolores. Luego de ser atendida, le dieron el alta, pero a las horas regresó con mayores malestares. Le pidieron que volviera al día siguiente, cuando le practicaron el primer legrado. Más tarde vendría un segundo legrado, y finalmente la decisión de extirparle el útero, tras lo que falleció.
En su permanencia en el hospital, la joven fue atendida por diferentes profesionales. La instrucción determinó que cinco de ellos tuvieron mayor responsabilidad, y son quienes están en juicio.
Los forenses oficiales del Poder Judicial, Pascual Rousse y Gabriela Cepeda, fueron los testigos principales del segundo día del juicio. En la jornada previa habían declarado la madre, la abuela y el novio de la víctima.
Muerte de Lucrecia: “Fue una actuación en conjunto”
La presencia de Rousse en la audiencia estuvo marcada por un fuerte intercambio con el fiscal Márquez, al punto que la jueza Edith Lezama de Pereyra dictó un cuarto intermedio y llamó a moderación a las partes para poder seguir con el trámite.
La falta de aplicación de antibióticos apenas se advirtió que existía una infección y el tiempo transcurrió hasta que se practicó el primer legrado fueron dos de los cuestionamientos del primer perito.
“No sé por qué esperaron tantas horas. Había una infección”, dijo en sala.
Aclaró que en medicina legal el resultado no siempre es exacto: “No puedo decir si lo que hizo cada uno causó muerte”, pero cree que entre quienes atendieron a Lucrecia, “no dieron importancia al grave estado”. Mencionó que hubo pasos “que se omitieron” y que “la paciente evoluciono mal”.
Cepeda fue en el mismo sentido y llamó la atención sobre la omisión de darle antibióticos para frenar la infección. “A la paciente se la atendió, pero cuestionamos ciertas conductas conservadoras”, dijo la médica.
Apuntando a las presuntas responsabilidades, dijo que fue “una actuación en conjunto” y se preguntó: “¿Dónde estaba un jefe que coordinaba a estos médicos? Quién gestiona que la paciente salga adelante es el jefe de servicio”, completó.
La médica consideró que Lucrecia debía haberse tratado con todas las prevenciones apenas llegó por primera vez al Hospital. “Las primeras son las horas doradas para salvarla. Cuando volvió era tarde. Al momento del segundo legrado su estado era catastrófico”, concluyó.
El juicio sigue adelante con la toma de testimonios y se espera que dentro de esta semana se den también los alegatos de las partes.
Recusación rechazada
La abogada querellante, Analia Nicolli, presentó este miércoles una recusación contra el fiscal de Cámara, Francisco Márquez.
Uno de los argumentos fue que la cónyuge del fiscal se desempeña con un cargo jerárquico en los servicios de salud del Hospital Pasteur, de donde son también los cinco imputados.
La jueza Edith Lezama de Pereyra no hizo lugar a la recusación y la audiencia sigue este miércoles con la toma de más testimonios.
Este jueves, en tanto, se inician los alegatos de fiscal, querellante y defensas. Luego, el tribunal deberá dictar sentencia.