El intendente Marcos Ferrer y el secretario de Economía, Raúl Bertalot, anunciaron este miércoles la puesta en marcha del sistema de semáforos “inteligentes” en la ciudad y explicaron cómo funcionan.
Los dos primeros, ya colocados sobre Avenida General Savio, fueron presentados como “un salto de calidad enorme para la ciudad” por el intendente.
Ambos semáforos están ubicados en la avenida más transitada de la ciudad, que la conecta con la ruta a Almafuerte, en las intersecciones con Paula Albarracín de Sarmiento (nudo vial del ingreso al polo industrial químico) y a calle Juan Álvarez (esquina de la estación de servicio Axion).
El intendente explicó que ambos semáforos, además de detectar infracciones de tránsito, cuentan con tecnología para brindar el servicio de monitoreo del aire y para mejorar la circulación vehicular.
Con respecto al monitoreo ambiental, destacó que ayudarán a despejar dudas sobre “el aire que respiramos los riotercerenses”. En la década de 1990 se habían instalado estaciones municipales de monitoreo con ese fin, que con los años se fueron desactualizando y entraron en desuso.
Otros tres semáforos con estas características serán instalados luego, durante este año. El próximo se ubicará en San Pedro y Cid Campeador y los siguientes posiblemente en las arterias de ingreso a la ciudad desde Tancacha, Villa Ascasubi y Corralito.
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Los dos primeros ya están funcionando a modo de prueba desde marzo pasado y arrojando datos en tiempo real al Centro de Monitoreo instalado en el municipio.
Luego de cuatro meses, Ferrer dijo que su funcionamiento es satisfactorio. Agregó que “esto recién empieza” y que la ciudad sumará otros servicios para avanzar hacia lo que se conoce como smart cities (ciudades inteligentes). “Este sistema pone a la ciudad en la vanguardia en este tipo de inversiones”, destacó.
El intendente dijo que Río Tercero sería la primera ciudad de la provincia en implementar el sistema de monitoreo ambiental del aire por esta vía.
La empresa proveedora de este sistema es ITC, de Río Tercero. “Es una empresa local, reconocida con premios internacionales por sus desarrollos de este tipo”, avaló el intendente.
A su vez dijo que la Municipalidad realizó “una fuerte inversión” en ese sistema, aunque la cifra no fue precisada. E indicó que será sustentable a partir del cobro de multas.
Lo que facture el sistema por cobro de multas será compartido entre la empresa ITC y el municipio. El esquema en ese sentido es similar al de otros municipios que cobran o han cobrado multas “filmadas” en su jurisdicción.
Tránsito
Los funcionarios municipales dijeron que este sistema de semaforización mejorará la onda verde y la transitabilidad en las calles donde aplique.
Explicaron que los semáforos tienen la capacidad de “leer” el tránsito, a través de sensores con inteligencia artificial, y habilitar el paso o prohibirlo de acuerdo al flujo de vehículos circulando en cada sentido. Indicó que eso evita mayores congestiones y por tal motivo reduce los tiempos de espera.
Bertalot manifestó que los semáforos cuentan con un sistema de cámaras que permite detectar infracciones como el cruce de esos semáforos en luz roja, exceso de velocidad o conductores utilizando su celular. Ferrer agregó que también pueden leer las patentes de los autos, lo cual sirve para mejorar la seguridad de la ciudad y detectar, por ejemplo, autos con pedido de secuestro.
Monitoreo del aire
Estos semáforos tienen adosado un equipamiento que permite el monitoreo de algunas características del aire. Detectarán la presencia de cloro y amoníaco, dos productos peligrosos que se almacenan en el polo industrial químico, y también si el aire contiene presencia de azufre o nitrógeno. Medirán también la temperatura del aire, la humedad, el nivel de ozono y las partículas en suspensión.
“Hay una decisión política, vamos a medir la calidad del aire y la vamos a publicar. Siempre hay dudas sobre la calidad del aire que respiramos y ahora vamos a contar con estaciones de monitoreos modernas”, remarcó el intendente. Además subrayó que los datos no se pueden alterar e insistió con que tampoco serán ocultados.
Hasta años atrás Río Tercero controlaba el aire y el agua con varias estaciones de monitoreo que se instalaron en la década del 90, durante la gestión de Carlos Rojo.Desde hacía años ya no tomaban más datos.
Bertalot valoró que la empresa proveedora de los sistemas es local, con capacidad técnica y operativa. Ferrer agradeció el trabajo de la empresa ITC y en especial a su socio, Walter Demaldé. Esa firma riotercerense gestiona avanzar con sistemas similares en otras ciudades.
Control de agua del río, aparte
Por último, los sistemas también anunciados que monitorearán la calidad del agua del río Ctalamochita, también siempre puesta en duda, aún no han sido instalados. Pero está previsto avanzar en esa línea.
