Luego de que la Unidad de Delitos Económicos receptara una multitud de denuncias en contra de Natalia García como presunta estafadora en la venta de paquetes de viajes turísticos, la acusada se presentó ayer en la Jefatura de Policía de Córdoba y quedó detenida.
Quedó alojada en el establecimiento penitenciario de Bouwer “Padre Luchesse”. La imputación que afronta es por estafas reiteradas. En los próximos días se sabrá si presta declaración o si se niega a hacerlo.
Por decisión de la fiscalía, el 23 de enero se ordenó dar con el paradero de García. Aunque se allanó su domicilio, la mujer no se encontraba en el lugar. Al día siguiente se exigió su captura y se decretó su restricción para salir del país. Según trascendidos de la causa, el perjuicio económico causado a las víctimas es muy grave, con más de 70 damnificados.
La causa esta a cargo de la fiscalía de Jorgelina Gutiez. El lunes se conocerá qué fiscal toma la continuidad del caso. Mientras tanto, se siguen recibiendo denuncias en la Unidad de Delitos Económicos.
Delitos de 2022
Otra de las novedades del caso, es que las presuntas maniobras delictivas que se le imputan a García serían en realidad continuación de una serie de estafas que ya habría efectuado la misma mujer en 2022 y bajo idéntica modalidad.
El abogado Carlos Nayi representa en la causa a dos grupos de 33 presuntos damnificados por la responsable de la agencia ubicada en la localidad de Villa Allende. Nayi recuerda que en 2022 fue partícipe de una causa contra la misma persona y que la resolución final fue la reparación del perjuicio y la extinción de la acción penal.
“Toda la actividad llevada adelante por esta mujer no tiene nada que ver con improlijidades o comunicaciones inconexas, sino directamente con una mala fe. Esto para la ley tiene el nombre de estafa”, aseguró el abogado.
La acción penal de 2022 se encuentra extinguida al haber reparado económicamente el daño. No obstante ello, muy posiblemente esa referencia sea tomada en cuenta en la nueva causa en curso. En base a antecedentes de ese tipo, el juzgado puede referenciarse para aplicar una pena mayor a García en caso de encontrarla culpable.
Tres años atrás, la agencia cuestionada llevaba el nombre “Zona de Partida” y tenía sus oficinas sobre avenida Monseñor Pablo Cabrera, de la ciudad de Córdoba. Las denuncias llegaron a la justicia provincial y como resolución de un acuerdo de partes se propuso una reparación económica integral.
Tras el arreglo, esas oficinas fueron cerradas y en la actualidad la acusada operaba vendiendo paquetes turísticos desde su teléfono personal, a través de una empresa denominada “Yana Viajes”.
Estafas “estratégicas”
Los testimonios de las víctimas reflejan que las supuestas estafas de Natalia García eran sistemáticas y desarrolladas bajo una estrategia y modalidad específicas.
Los clientes llegaban a la acusada por recomendación de personas cercanas. Según la acusación, García no estafaba a toda su clientela, sino que seleccionaba minuciosamente a sus potenciales víctimas. Luciana, una de las damnificadas, explicó a La Voz que le compró en reiteradas oportunidades viajes que pudo concretar, pero que con los últimos dos la vendedora recibió el pago del dinero y nunca efectuó la compra de los pasajes aéreos. “Ocho mil dólares pagué y siempre me decía que estaba intentando solucionar el tema”, contó la víctima.
Otro damnificado, Gastón, pagó un paquete de viaje a Punta Cana para realizar en enero de este año junto a toda su familia. “Una semana antes de la fecha, le pedí los vuelos y no me respondió más. Fuimos a su casa y tampoco la encontramos”, relató y explicó que llegó a ella por recomendación de la hermana de la misma vendedora.
Las supuestas estafas de Natalia García llegaron a afectar a dirigentes políticos. La diputada Alejandra Torres confirmó a este diario que García es hermana de la esposa de uno de sus hijos y que también estafó a integrantes de su grupo familiar. Una de las hijas de la diputada habría comprado un viaje al exterior que nunca logró concretar.