Silvio Garattini nació en Bérgamo en 1928. Es médico, farmacólogo y presidente del Instituto de Investigaciones Farmacológicas Mario Negri de Milán, que fundó en 1961. A lo largo de su carrera fue asesor de la Organización Mundial de la Salud (OMS), miembro de la Agencia Europea de Medicamentos y formó parte prestigiosas instituciones científicas.
También denunció los excesos de la industria farmacéutica, la medicalización innecesaria de la población y la escasa atención a la prevención. Hoy, a los 96 años, sigue activo en el trabajo, en la investigación y en la divulgación pública sobre cómo vivir más y mejor.
Comer menos: una clave para vivir más años
Garattini asegura que la moderación en la comida es una de las claves más importantes para la longevidad. Según explica, reducir un 30% la cantidad de alimentos podría aumentar la esperanza de vida hasta en un 20%, basándose en estudios científicos realizados en animales.
“Comer poco, menos de lo necesario, es un factor de longevidad”, resume.
El médico promueve una dieta variada, inspirada en el modelo mediterráneo, con poca carne, poca azúcar y nada de alcohol. Considera que el vino debe tratarse como el tabaco, ya que el alcohol es cancerígeno. También cuestiona modas como el ayuno intermitente, a las que califica de ineficaces cuando no se modifican otros hábitos.
Los hábitos que él sigue cada día
Garattini no sólo habla desde la teoría. En su rutina diaria incluye:
- Dormir al menos 7 horas
- Hacer ejercicio físico moderado
- Mantener relaciones sociales
- No fumar ni consumir drogas
- Mantener el cerebro activo
Además, se aplica todos los esquemas de vacunación y controles preventivos. Su desayuno consiste en un café; al mediodía, jugo de naranja y galletas; por la noche, una cena completa.
El cáncer y la prevención: una batalla cultural
Como oncólogo, Garattini insiste en que entre el 30% y el 50% de los cánceres son evitables. Fumar, beber alcohol, consumir alimentos ultraprocesados o llevar una vida sedentaria son factores de riesgo ignorados con frecuencia.
“Nos cuesta aceptar que el vino es cancerígeno porque tenemos una cultura que lo normaliza”, advierte.
También promueve políticas públicas más estrictas: advertencias sanitarias en las botellas de vino, prohibición de la publicidad de bebidas alcohólicas y aumento de impuestos al tabaco.
La industria farmacéutica bajo la lupa
Garattini denuncia que muchos medicamentos se aprueban sin suficiente comparación con otros ya existentes. Esto genera un mercado saturado de productos con escaso valor terapéutico.
También alerta sobre la falta de estudios específicos en mujeres y en adultos mayores, los principales consumidores de fármacos.
“La medicina se ha centrado en tratar enfermedades, no en prevenirlas”, señala.
¿Es posible vivir hasta los 100 años con buena salud?
Garattini cree que alcanzar una longevidad saludable depende, en gran medida, de nuestras elecciones personales. Sostiene que hace falta una revolución cultural que priorice la prevención y la educación para la salud sobre el consumo de medicamentos.
Y aunque no teme a la muerte, mantiene una actitud activa:
“Hay que vivir como si mañana no estuviéramos, pero actuar como si tuviéramos mucho tiempo por delante”.