Tras los fuertes incrementos que se vienen aplicando en la tarifa de la energía eléctrica, especialistas aseguran que se puede reducir el consumo en los hogares sin demasiada inversión ni llegar a la instalación de equipos alimentados por energías renovables. Para eso es indispensable la búsqueda de la “eficiencia energética”.
Se trata de una estrategia que no sólo ayuda a reducir costos a corto plazo, sino que también contribuye significativamente a mitigar el cambio climático y a garantizar un suministro energético más estable y equitativo a largo plazo.
El arquitecto Edgardo Suárez es director del Instituto de Sustentabilidad Edilicia (ISE) del Colegio de Arquitectos de la Provincia de Córdoba (CAPC) y actual asesor de la nueva Secretaría de Transición Energética de la Provincia. Destaca la importancia de capacitar a los tomadores de decisiones, desde el arquitecto que diseñó la vivienda hasta los residentes que viven en ella.
“El cambio climático es condicionante y eso repercute directamente en todos los niveles de demanda de energía”, enfatiza Suárez, y agrega que, “en este contexto de analfabetismo energético, la mejor estrategia es identificar y establecer qué diferencias hay entre demanda, consumo y energías renovables”.
“Cuando vos entendés que reduciendo la demanda después resolvés el consumo, y aun más, a su vez, sabiendo de dónde viene la energía”, sostuvo el director del ISE. Explicó que “es mucho más inteligente pensar cómo hacer para disminuir el problema para que, cuando se deba usar un equipo eléctrico, demande menos energía y no tenga que tener una determinada capacidad”.
“Las dos grandes problemáticas de las viviendas son la climatización y las heladeras, luego en un tercer lugar está la iluminación, pero no mueve el decibelímetro prácticamente”, indica Suárez, y advierte que las heladeras como artefacto único son las que más energía demandan, representando el “8% del consumo total”.
Consejos para ahorrar
Para entender la diferencia, una heladera de más de 10 años consumía en promedio unos 1.500 KiloWatt/hora (KW/h) y ahora, con el avance de la tecnología, se consiguen equipos con un consumo promedio de 300 KW/h.
En el ámbito doméstico, hay que utilizar pequeños cambios en los hábitos de consumo o aplicar diferentes estrategias que actualmente se subvaloran, pero que hacen un consumo más eficiente.
Suárez señala que, por ejemplo, hay que aplicar “vampiros energéticos”, que es un dispositivo analógico que corta la energía electrónicamente, bajando las térmicas, y deja funcionando solamente los circuitos que se necesitan.
Otro dispositivo son los sensores de movimientos en los lugares más habitados de la casa, que apagan las luces cuando no hay movimiento en el sitio, o colocar buenos aislantes –como cortinas externas o persianas– en ventanas que estén demasiado tiempo expuestas a la luz solar.
Según el ingeniero industrial Federico Origlia, “lo primero es bajar los consumos con ahorros conscientes”.
“Lo segundo es hacer inversiones con rápidos retornos (por ejemplo: agua caliente a partir de termotanques solares) y, por último, el tema aislaciones (para invierno y para verano) de la envolvente de la vivienda”, se explaya el especialista.
“El agua caliente sanitaria (ACS) sólo se lleva el 8% de nuestro consumo, pero asimismo ese consumo podemos bajarlo a casi cero con la ayuda de un termotanque solar”, destaca Origlia.
Por otra parte, el ingeniero indica que “el 60% del consumo de una vivienda promedio se lo lleva la calefacción o aire acondicionado, de ahí la importancia de pensar en la incorporación del sweater y la sombrilla para ayudar a la climatización del hogar”.
En este sentido, la presidenta del Colegio de Ingenieros Especialistas de Córdoba (Ciec), Carmen Rodríguez, remarca que es “crucial poseer una instalación que no tenga pérdidas y contar con todo lo que más se pueda de bajo consumo”.
“Los electrodomésticos que se utilizan con mayor frecuencia están gran parte del tiempo encendidos. Debemos tratar de comprar aquellos que son de alta eficiencia energética”, señala Rodríguez, y agrega: “Para determinar esa eficiencia, siempre es imprescindible fijarnos en las etiquetas que traen los equipos”.
Para leer bien una etiqueta de eficiencia energética (EE), debemos saber que esta se representa mediante letras y colores en una escala que suele ir desde la A (color verde). Los más eficientes son hasta la G (color rojo), que representa a los que demandan mayor consumo.
A su vez, con el avance de la tecnología y la aparición de productos cada vez más eficientes, la letra A se subdividió y en algunos electrodomésticos vamos a encontrar una A+, A++ y A+++, estos últimos, los más eficientes del mercado en relación con su consumo.
Otra de las medidas adoptadas por algunas familias es la implementación de energías renovables, como equipos solares térmicos (calefones) o paneles fotovoltaicos.
Es así como Rodríguez manifestó que la implementación de estas medidas “tiene un costo muy elevado y una tasa de retorno a muy largo plazo, pero es altamente aconsejable para aquellos que lo puedan hacer, porque la energía solar no tiene costo y es muy importante para el medioambiente”.
Tarifas más caras
En el último mes, la Secretaría de Energía de la Nación determinó un incremento en la factura de luz del 60% para el sector de la población que actualmente no recibe subsidios y alcanza al 40% de los usuarios.
No obstante, también subió el valor agregado por distribución (VAD) que aplica Epec, que, en promedio, será de 10,35%. Además, el Ente Regulador de los Servicios Públicos (Ersep) está tratando un nuevo aumento para marzo de 17,28%.
En estos tiempos, ¿conviene instalar paneles fotovoltaicos?
Con las tarifas más caras, toma fuerza la alternativa de instalar equipos que generan electricidad en el hogar de manera sustentable. Estas energías renovables tienen una vida útil de más de 30 años y no requieren costos de mantenimiento. Van desde los paneles solares hasta equipos solares térmicos (calefones).
Los paneles fotovoltaicos son una alternativa viable que muchos eligen e invierten en estos tiempos. Para tomar dimensión, basta con ponderar que la completa instalación de esta tecnología ronda los U$S 4 mil.
En primer lugar, el ingeniero Domingo Mario Vitale explicó que hay que diferenciar “sistemas aislados, que son lugares adonde no les llega la energía de red, y sistemas conectados a la red pública nacional (generación distribuida), que es la que más se utiliza en la provincia de Córdoba”.
“Los costos son diferentes en los dos casos, porque, en los lugares adonde no llega la energía de red, se necesita almacenar en baterías y eso encarece la instalación”, destacó Vitale, y agregó: “En cambio, los que están conectados a la red, a través de un inverter, funcionan y se utilizan de forma directa”.
“La persona que coloca una estación fotovoltaica se transforma directamente en un usuario generador, porque tiene la capacidad de consumir su propia energía e inyectar a la red el excedente o la que no consume durante el día”, señaló el ingeniero.
La instalación de paneles solares puede implicar un costo inicial significativo. Sin embargo, este valor fue disminuyendo en los últimos años debido a avances tecnológicos. Además, en Córdoba, el Gobierno provincial facilita la colocación con incentivos y regulaciones que ayudan a la adopción de energía solar.
Marcelo Sufé, gerente comercial de Iris Energía, explicó a La Voz que “el costo total de instalar energía solar en una casa puede variar según el tamaño del sistema y los equipos seleccionados”.
“En la Argentina, se estima que el costo de un sistema de energía solar residencial arranca en los U$S 4 mil”, remarcó.
Un kit solar full incluye los módulos de paneles solares necesarios, inversor de corriente, estructura, cables, instalación y la proporción de los certificados que requiere la ley de seguridad eléctrica de Córdoba
Sufé remarcó que estos equipos tienen una vida útil que va de los 30 a los 40 años. “Después, disfrutarás de más de 20 años de energía completamente gratuita. Esto significa que la instalación solar es una decisión financiera inteligente”, manifestó.
Ante la consulta, los especialistas consideran a Córdoba como un escenario ideal para instalar y utilizar la energía solar, ya que la ciudad goza de una gran cantidad de horas de sol al año.
Es importante conocer que no necesariamente se necesita colocar equipos que abastezcan la totalidad del consumo, sino que se pueden instalar equipos de menor capacidad y luego agregarlos, siempre consultando con los especialistas.
Sobre otras alternativas, como la instalación de equipos solares térmicos, Pablo Priore, dueño de Carlos Paz Solar, informó a La Voz que la colocación de un calefón para una familia tipo supone una inversión final desde $ 800 mil hasta $ 1.000.000. Estos equipos permiten calefaccionar solamente las aguas sanitarias.