En medio de la vigilia y la esperanza por la recuperación de Martín Gonzalo Cáceres, de 24 años, conocido cariñosamente como “Tincho” , quien permanece en coma inducido tras ser brutalmente agredido a la salida de un boliche en Córdoba, un texto compartido por sus amigos a La Voz reveló la huella que el joven deja en sus vidas.
Para sus amigos, describir a Martín es evocar la palabra “auténtico”. Lo definen como una persona genuina, que se muestra tal cual es en cualquier circunstancia, con convicciones fuertes y una “soberanía sobre su propia cabeza que es espectacular e híper valiosa” en un mundo que perciben como superficial.
Su creatividad para emprender nuevos proyectos y hobbies es otro rasgo admirado por su círculo cercano. Lo describen como un “buscador constante de verdades, de su felicidad y de las personas que lo rodean”, siempre con ideas en mente y brindando apoyo a los proyectos de sus amigos.
La amistad de Martín es calificada como “de oro” , en el sentido más preciso de la palabra. Sus amigos destacan su curiosidad, su escucha atenta y honesta, y su capacidad para comprender y alentar a los demás a ser mejores. Son conscientes del impacto positivo que tiene en sus vidas.
Dentro de uno de sus grupos de amigos, Martín es apodado como el “capitán”. Su presencia es convocante, y su “luz y energía tan particular” son una fuente de bienestar para quienes lo rodean. Los momentos compartidos con él son valorados como especiales y genuinos. Su humor, sarcasmo e ironía son motivo de risas. Según el mensaje de sus amigos tiene la capacidad de hacer reír hasta las lágrimas con sus comentarios ocurrentes, al igual que ofrece su oído cuando alguien lo necesita.

Martín es descrito como “siempre solidario y amable” y calificado como “extremadamente pillo” y observador. Para sus amigos, es un “hermano, hijo, amigo y ser humano alucinante e incondicional”, una persona única e irremplazable.
Ante la situación que atraviesa Martín, sus amigos se congregan diariamente en la puerta del hospital para brindarle su “inconmensurable amor y fuerzas”, acompañando también a su familia. Confían en su fortaleza y lo esperan con la esperanza de su pronta recuperación.