La inflación, que en 2021 alcanzó el 50 por ciento anual, también afectó a las prendas escolares. A poco más de una semana del inicio del clases, se trata de insumos relevantes en los que deben pensar, y recalcular, muchas familias.
Según un relevamiento realizado por La Voz entre distintos comerciantes del rubro, vestir a un alumno o alumna costará este año entre un 40 por ciento y un 60 por ciento más caro que un año atrás.
A casi dos años del inicio de la pandemia, este inminente comienzo de clases asoma distinto al de 2021. El avance en la campaña de vacunación contribuyó a mitigar la incertidumbre sanitaria que predominó en los dos años anteriores y los gobiernos han anunciado que las clases serán presenciales.
Sin embargo, el movimiento en las tiendas de venta de uniformes todavía no es muy intenso.
“Está tranquilo. A esta altura pensábamos que iba a haber un movimiento masivo. Se movió un poco en diciembre y otro poco en enero. Últimamente, la gente busca uniformes más cerca del inicio de las clases. Ya no hay desconfianza por la pandemia y la restricción de clases como el año pasado”, apuntó Alba Cosentino, encargada en IP uniformes.
“El aumento para este año es de cerca del 50 por ciento con respecto a los precios del año pasado”, agregó Cosentino.
Sin los zapatos ni las zapatillas, el costo de vestir a un estudiante para el verano y el invierno está entre 15 mil pesos y 20 mil pesos, aproximadamente.
Una campera de algodón frizado está en 3.900 pesos; un pantalón de vestir, en 3.700 pesos, y uno de jogging en torno de los 2.700. Una remera para educación física, cuesta unos 1.500 pesos; las camisas, alrededor de 2.600 pesos; las polleras, 3.000, mientras que por un jumper escocés se paga alrededor de 6.600 pesos.
Un pullover está a 2.530 pesos y un cardigan, a 2.750. En tanto, un par de medias se consigue por 420 pesos, el mismo precio por el que se debe pagar una corbata escolar sencilla.
Un adecuado barbijo de tela, elemento clave para esta nueva etapa, está en 260 pesos.
En internet se consiguen ofertas de guardapolvos a 1.400 pesos (pero hay del doble también).
“Por ahora, hay muchas consultas de precios. Se nota cautela en los padres. Por ahora van viendo. Me parece que van a comprar lo justo y necesario para el inicio de este período escolar”, expresó Martín Shuf, de Tienda Vogel, un negocio que abastece a colegios de la zona norte de la ciudad de Córdoba.
Aumento en los insumos
“El 70 por ciento de las compras son las básicas: remera, jogging, chomba y short. Hay muy poco movimiento en cuanto a la ropa de invierno”, agregó Shuf, quien apuntó que el aumento en los productos de febrero de 2021 a este año fue del 42 por ciento. “Aunque los insumos y las materias primas aumentaron un 60 por ciento”, acotó.
“Hace más de 15 años que estamos en este sector y entendemos bien los ciclos comerciales. Hoy resignamos unos puntos de margen y apostamos al volumen”, completó.
“Notamos que la gente está más confiada que el año pasado con respecto al inicio de clases. El año pasado se notaba el miedo y la mayoría compraba lo justo y necesario. Ahora, el que puede compra ropa de verano y de invierno”, señaló en tanto Gabriela Pelizza, de Bis Uniformes.
“No hay un furor, para nada. No es que se vean colas de gente comprando ropa para el colegio. Pero comenzó a moverse de a poco”, agregó.
Pelliza reconoció que las prendas escolares tienen cerca de un 30 por ciento de aumento con respecto al año pasado. “Pero lo que más nos aumentó no fueron las telas, lo que subió más fueron los costos como la mano de obra, los impuestos, los alquileres”, cerró.
Los aumentos en el calzado escolar
El calzado es el ítem de mayor incidencia en el presupuesto escolar. Según distintos miembros del rubro, hubo aumentos en los precios de entre un 30 por ciento a un 50 por ciento con respecto al año pasado.
“Por el momento se ven muchas consultas. Crecen las ventas sobre todo cuando hay promociones bancarias. Es que una mamá con dos hijos en edad escolar no gasta menos de 40 mil pesos entre zapatos y zapatillas”, contó una vendedora de una conocida tienda de zapatos del Hipermercado Libertad.
“Un par de zapatillas de buena calidad arranca en los 6.000 pesos. Y de ahí para arriba. Podés encontrar un par por dos mil pesos, pero de muy mala calidad y que a un chico no le va a durar más de dos meses”, señaló Marcos Maslub, representante de la fábrica de ropa y calzado Area para todo el país.
Maslub reveló que la venta está tomando impulso conforme se acerca el comienzo de las clases. “Ya no se pide tanto el zapato tradicional. Ahora los chicos van con zapatillas negras, que son más cómodas y en casi todos los colegios las permiten”, cerró.
Ropa usada y trueques
Ya es natural para muchos padres buscar prendas escolares tanto en una tienda como en los grupos de Whatsapp o de Facebook donde se ofrece ropa de años anteriores y en buen estado.
Algunos padres consultados admitieron que este año no comprarán “todo nuevo” porque les quedó ropa del año pasado “en perfecto estado”, gracias el poco uso en pandemia.
“Los uniformes aumentan mucho y si comprás usado te ahorrás por lo menos la mitad del precio”, contó Vanesa, mamá de dos alumnos del colegio La Salle y creadora de un grupo de madres en Whatsapp donde circulan ofertas de uniformes usados.
“Generalmente averiguamos cuánto salen las prendas en el colegio o en los comercios donde se venden y compartimos esa información en el grupo. Hoy por hoy hay mucha actividad”, agregó.
Vanesa recordó que creó el grupo a raíz de la pandemia cuando vio que sus hijos prácticamente no usaron sus uniformes nuevos. La idea era intercambiar ropa, no venderla. Sin embargo, ahora se compra y vende –dijo– “a muy buenos precios”.
“Me sorprendió el movimiento que se generó. Ahora el grupo tiene un rumbo propio, es decir se usa para contactarse con otras madres y conseguir lo que te haga falta”, cerró.
Con el calzado sucede lo mismo. Existen grupos de padres en Facebook en los que se consigue un par de zapatos en muy buen estado por 3.000 pesos.
