El Ministerio de Educación de Córdoba informó que la deserción escolar en la provincia se redujo en un 0,4% gracias a la implementación de diversas herramientas y a un trabajo mancomunado con municipios y comunas.
Sin embargo, también mencionó que la dificultad persiste en el nivel secundario, especialmente al inicio del segundo ciclo. La mayoría de los casos de intermitencia o abandono en la trayectoria escolar de los estudiantes se producen entre tercer y cuarto año.
En ese sentido, el ministro de Educación provincial, Horacio Ferreyra, explicó que es necesario focalizar la atención en el grupo de adolescentes de entre 14 y 17 años. “Hoy son más de tres mil. Tenemos identificados a 2.796, a quienes contactaremos en los próximos días”, afirmó.
Desde la cartera educativa, valoraron la disminución de adolescentes fuera del sistema. “Para 2012, eran más de 10 mil. Aún tenemos mucho trabajo por hacer”, agregaron.
El año pasado, por decreto del gobernador Martín Llaryora, se creó el Sistema Integral de Promoción y Protección de Trayectorias Educativas, conocido como “Trayectorias Cuidadas”. Este sistema reúne diversas estrategias que combinan el uso de información para la detección temprana de situaciones de riesgo o vulnerabilidad educativa, el acompañamiento pedagógico y la articulación socioterritorial.
En la educación secundaria, se implementó un módulo de alertas tempranas con información nominal que permite el seguimiento individualizado de las trayectorias educativas. “Esto nos permite conocer la situación de cada estudiante en tiempo real y, de esta manera, prevenir el abandono”, advirtieron desde el Ministerio.
Además, se llevan a cabo diferentes acciones de acompañamiento institucional y pedagógico, como tutorías, el seguimiento de la tercera materia y trayectorias escolares asistidas.
También se desarrollan acciones de articulación socioterritorial, que incluyen equipos técnicos de acompañamiento territorial (Epae), con al menos uno en cada departamento y cinco en la ciudad de Córdoba. Estos equipos tienen la función de abordar y coordinar diversas estrategias de promoción y protección de trayectorias, con especial énfasis en situaciones complejas.
“Además, estamos conectados con los gobiernos locales para trabajar conjuntamente desde las áreas municipales y comunales de educación, desarrollo social, salud, entre otras, con el objetivo de garantizar que cada vez más chicos y chicas estén en la escuela aprendiendo”, destacó Ferreyra.
“Cuando un estudiante falta tres o más veces, la escuela se comunica con la familia. Si no logra contactarla, intervienen los equipos locales para identificarlos y lograr que retomen sus estudios”, agregó.
Programa de Inclusión y Terminalidad (PIT)
Con el objetivo de posibilitar la continuidad de estudios, el año pasado se habilitaron 83 servicios distribuidos en todo el territorio provincial, con la participación de 3.198 jóvenes de entre 14 y 17 años. Para quienes tienen 18 años o más, se ofrece orientación hacia los Centros Educativos de Jóvenes y Adultos. “La intención es garantizar la educación obligatoria para todos”, afirmó el ministro.
Desde el Ministerio de Educación aseguraron que contactarán a los estudiantes para que el 17 de febrero rindan sus materias o, en su defecto, retomen sus estudios en sus respectivas escuelas, se sumen a un PIT 14-17 o asistan a un centro de educación para jóvenes y adultos.
En cuanto a la educación para adultos, el año pasado se crearon siete centros integrados donde los estudiantes no solo cursan la secundaria, sino que también se forman en un oficio. Para este año, está prevista la apertura de 11 nuevos centros.
Por último, el ministro expresó que, en el desafío de fortalecer las propuestas educativas, se trabaja en la inclusión de los proyectos de vida de los estudiantes, la vinculación con el mundo laboral, la incorporación de tecnologías, el desarrollo de las ciencias de la computación y el bienestar estudiantil.