La temporada alta en los campings cordobeses inicia en enero, pero varios de estos establecimientos turísticos de las Sierras ya están recibiendo consultas y hasta algunas reservas para el próximo verano. No obstante ello, la situación inflacionaria está impactando directamente en estos alojamientos alternativos, al punto que no son pocos los que todavía no tienen tarifas definidas para los próximos meses.
Tradicionalmente, los campings son las opciones más económicas para muchas familias que necesitan abaratar costos en vacaciones o disfrutar de una estadía distinta, permitiéndoles desconectar de la rutina sin tener que hacer grandes viajes ni erogaciones de dinero.
“A pesar de las actuales circunstancias, que no son para nada normales, ya tenemos consultas desde hace muchos meses, una situación similar a la del año pasado. El tema más complicado es estabilizar los precios: hoy puedo dar una tarifa estimativa, pero dudo que ese precio sea el mismo que a fines de la temporada”, comentó Gabriel, uno de los encargados del camping El Pinar, ubicado en Villa Carlos Paz.
La mayoría de los campings informa valores para diciembre, aunque advierten que esos precios se irán modificando a medida que avance la temporada. Algunos prefieren esperar a enero para iniciar y definir precios distintos para febrero y marzo.
“Hay muchas consultas, pero la mayoría por ahora no se concretan en reservas para estadías. Nosotros nos la jugamos y ya definimos precios para la temporada, somos uno de los pocos con esta modalidad. La gente va pagando en cuotas durante el año y no movemos esos valores”, explicó Alberto, dueño del camping La Ribera, ubicado también en Villa Carlos Paz.
Los operadores del sector coinciden en que luego de la pandemia la gente quería salir y viajar más. Pero señalan que hoy las vacaciones se han acortado por cuestiones económicas. Generalmente, los turistas se alojan pocos días y desarrollan un turismo cada vez más “gasolero”.
Alberto comentó que otro de los problemas que enfrenta este tipo de alojamientos son los alquileres informales de departamentos y cabañas, que compiten directamente con campings y hoteles. Afirma que en varias ciudades turísticas se pueden encontrar alquileres accesibles y en pesos, a diferencia de otros destinos como por ejemplo Mar del Plata o Pinamar.
Por lo pronto, hay familias y grupos de amigos que ya han decidido pasar algunos de los próximos días festivos en carpa. “La expectativa viene floja, pero para Navidad y Año Nuevo tenemos gente que ya reservó y viene con toda su familia”, aseguró Elsi, dueña del complejo “La Elsi”, ubicado a pocos kilómetros de Villa General Belgrano.
Algunos precios
Los dueños de los campings cordobeses aseguran que están tratando de hacer cuentas muy “finas” para ofrecer tarifas accesibles para el público. Aunque muchos todavía no han definido precios finales.
Para lo que queda de diciembre y los primeros días de enero, las tarifas por persona y por día, rondan entre los $ 3.000 y los $ 6.000.
Por ejemplo, en el camping “La Ribera” el precio por persona adulta es de $ 3.500 diarios y para los niños de $ 2.000. El lugar no cuenta con pileta ya que está situado a pocos metros del tradicional balneario Playas de Oro.
Entre sus servicios cuenta con baños, lavamanos y lavarropas, agua caliente, quiosco, juegos para niños, sala comedor, internet, quincho cerrado y vigilancia las 24 horas. Se puede ingresar con mascotas de buen comportamiento como en la mayoría de los campings.
En el camping “El Pinar” los precios son más elevados, pero cuenta con un gran abanico de servicios, como pileta olímpica, toboganes de agua, cancha sintética de fútbol y vóley, gimnasio y sala de juegos. Para acampar, por día, los adultos deben pagar $ 5.000 y los niños $ 4.000. Para quienes lleguen en motorhome los costos son más elevados.
Este establecimiento cuenta con una arboleda especial y una zona con media sombra para los campistas. Cada parcela tiene asador, lavamanos y electricidad. Para uso común hay mesas y sillas individuales.
En el camping familiar “La Elsi” los precios son similares: $ 5.000 los mayores y $ 3.000 los niños. No tiene pileta ya que el lugar queda al lado del río. También cuenta con comodidades para los campistas, como zonas techadas, electricidad, baños, agua caliente, entre otros servicios.
¿Cuánto cuestan los artículos de camping?
Para salir de camping es necesario contar con un equipo básico que permita una estancia agradable. Los comercios dedicados a este rubro calculan que armar un kit básico para que acampe una familia tipo demanda actualmente alrededor de $ 500 mil.
Desde “El buen pique”, uno de los comercios cordobeses dedicados a la comercialización de estos equipamientos, señalaron que enero es uno de los meses más fuertes en ventas, aunque aseguran que los campistas más experimentados ya adelantaron sus compras en invierno para ganarle a la inflación.
Una bolsa de dormir simple, que suele usarse en acantonamientos, se consigue desde los $ 30 mil. Aquellos que acampan más a menudo y buscan productos con mayor resguardo de la temperatura corporal, pueden encontrar bolsas de dormir de mayor calidad a partir de los $ 60 mil. Los aislantes cuestan entre $ 3 mil y $ 9 mil.
Por el lado de las carpas, hay mucha variedad dependiendo de la capacidad y si cuentan con sistemas impermeabilizantes especiales. Por ejemplo, una carpa para tres personas ronda los $ 185 mil y para cuatro, los $ 216 mil.
Hay carpas de menor calidad con precios que parten en los $ 140 mil para cuatro personas, y para dos en $ 95 mil.
Los precios de las conservadoras también varían según el tamaño: por ejemplo, una de 20 litros se puede conseguir desde los $ 35.700 mientras que otra de 32 litros, familiar, ronda los $ 42 mil.
El precio de los anafes camperos cambia según su potencia. Los que son de bolsillo, preferidos por los mochileros, rondan los $ 28 mil, mientras que los más grandes parten desde los $ 43 mil.
Las mesas especiales para camping se venden desde $ 17 mil, mientras que las que incluyen cuatro banquetas plegables se ubican en torno a los $ 85 mil.
Las linternas son otro elemento de mucha utilidad cuando se duerme en la naturaleza. Un farol led a batería cuesta $ 15.700; una linterna de mano a batería sale aproximadamente $ 20 mil; mientras que las más económicas a pilas rondan los $ 9 mil.